Coronavirus en Murcia

"La retirada de las mascarillas genera ansiedad y estrés en algunas personas"

"Para evitar el síndrome de la cara vacía, es importante no obligar a nadie a quitársela si no quiere: cada uno lleva su propio proceso", dice la psicóloga Cristina Pastor

Cristina Pastor Illán, psicóloga.

Cristina Pastor Illán, psicóloga. / Juan Carlos Caval

Ana Lucas

Ana Lucas

La psicóloga Cristina Pastor Illán explica que la retirada de la mascarilla puede generar «síntomas físicos» en algunas personas, hasta el punto de causarles ansiedad y fobia. La experta habla con LA OPINIÓN sobre el conocido como síndrome de la cara vacía.  

Se habla desde hace un tiempo del síndrome de la cara vacía, un conjunto de problemas que se manifiesta en las personas que se sienten inseguras cuando no llevan la mascarilla. Los psicólogos, ¿han detectado ya esto en la Región de Murcia?. 

Sí, nos estamos encontrando con personas que presentan algunos síntomas relacionados con este síndrome: predomina la inquietud, el nerviosismo, la ansiedad y malestar general ante el hecho o el pensamiento de salir sin mascarilla. Este nerviosismo se va a dar por la llegada de pensamientos intrusivos negativos, como, por ejemplo, ‘me voy a contagiar’. Tras esos pensamientos podemos tener síntomas físicos como: palpitaciones, sudoración, bloqueo...

¿Tan exagerados los síntomas en todas las personas?

Hay grados o distintas intensidades en la manifestación de los síntomas. Hay quien está manifestando esto de una forma muy leve, pero también hay quien lo manifiesta con más intensidad, ya que esto está muy relacionado con el proceso de adaptación de la persona. Vimos al principio de la pandemia que había personas que no querían ponerse la mascarilla, pero luego se aceptó y se normalizó hasta el punto que algunas personas lo han integrado tanto en sus vidas que les crea gran seguridad llevarla.

Dado que no existe tratamiento para este síndrome, ¿qué le aconsejaría a una persona que lo padezca?

Se van a tratar los síntomas individuales: el tratamiento iría enfocado principalmente a adquirir habilidades para el manejo de la ansiedad, el estrés y el control emocional. Si el miedo es muy intenso e incapacitante y le impide a la persona llevar su vida cotidiana con normalidad y socializar se, va a tratar como una fobia y el tratamiento iría en ese sentido. Pero hay que tomar este tema con tranquilidad: al igual que necesitamos adaptación cuando teníamos que ponérnosla, vamos a necesitar nuestro tiempo para quitarlas. Es muy importante respetar el tiempo de cada persona, no obligar a nadie a quitársela si no quiere y ser comprensivos, cada uno lleva su proceso

La ansiedad, ¿se está generalizando últimamente, dando más que hace años?

Sí, hay mas ansiedad porque nos encontramos ante una crisis no solo sanitaria, sino también económica y social. Estamos ante una situación estresante y evidentemente aumenta la ansiedad, por la incertidumbre creada. 

¿Cuáles son las características más comunes para reconocer que padecemos el síndrome de la cara vacía?

Lo vamos a reconocer cuando presentemos nerviosismo excesivo, inquietud e incluso ansiedad ante el pensamiento o el hecho de estar sin mascarilla fuera de casa. Si los síntomas persisten y le impiden a la persona relacionarse y llevar su vida cotidiana normal se debería pedir ayuda profesional.

¿Han notado ya en las consultas esa ola de salud mental que auguraban algunos expertos, de la mano de la covid?

Sin duda, la ola de salud mental es una realidad. Las restricciones que hemos tenido conllevan una deriva emocional que nos genera incertidumbre, inseguridad y miedo dando lugar a un aumento en los niveles de estrés, esta situación de forma continuada puede dar lugar a patologías importantes, desde ansiedad, depresión, dificultad del manejo del estrés o incluso casos de trastorno de estrés postraumático. Las consultas a profesionales de la Psicología han aumentado mucho: hay lista de espera para poder acceder a los servicios de psicología públicos, llegando incluso a los uno o dos meses de espera en salud mental dependiendo de la zona sanitaria. Además, el impacto de la pandemia en los niños también se están haciendo presente: trastornos de conducta alimentaria, ansiedad, trastorno obsesivo compulsivo... En los adolescentes se ha incrementado mucho el consumo de pantallas, dando lugar a casos de adicción.