El aeropuerto de la Región no llevará el nombre del inventor del autogiro, Juan de la Cierva, después de que Aviación Civil se plegara al dictamen contrario de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática, basado en un informe firmado por el historiador, abiertamente socialista, Ángel Viñas que, además, no ha sido sometido a ningún otro informe contradictorio. Seguramente este último podría haberlo escrito el historiador y profesor de la Universidad Rey Juan Carlos Roberto Villa García.

Ángel Viñas relaciona a Juan de la Cierva con el golpe de Estado del 36, ¿existe esa relación? Él afirma que conspiró durante meses.

En el informe adjunto que remitió Ábalos al consejero de Fomento de la Región, Viñas no ha demostrado en ningún caso que Juan de la Cierva participara en la sublevación ni tampoco que conspirase. Sublevarse y conspirar son cosas, por cierto, distintas y la segunda no la contempla la actual Ley de Memoria Democrática. Sin embargo, Viñas no ha tenido ningún problema en avalar como ‘democrática’ la trayectoria de políticos republicanos y socialistas que sí participaron muy activamente en conspiraciones y sublevaciones, tanto contra la Monarquía constitucional como contra la Segunda República.

¿Tuvo relación con intelectuales y políticos de extrema derecha cercanos a Hitler y Mussolini, como le acusan?

En aquella época, donde fascismo y comunismo aún no se percibían de manera negativa, raro era no tener ese tipo de relaciones, por la izquierda o por la derecha. Federico García Lorca tenía amigos en el PCE y en la Falange. Pero De la Cierva nunca fue un fascista. En realidad, sus ideas estaban muy cercanas a las de su padre, que era un monárquico. Pero los mismos republicanos reconocieron su neutralidad, en el sentido de no hostilidad, al régimen de la Segunda República.

¿Es el ‘Dragon Rapide’ una prueba irrefutable de que colaboró con los golpistas?

No, no lo es. No conocemos los términos de esa supuesta colaboración, ni tampoco tenemos una prueba irrefutable sobre ella.

También se le acusa de trabajar para conseguir armas para los sublevados una vez comienza la Guerra Civil.

Una vez que comienza la Guerra Civil, y España tiene dos gobiernos, está claro que se alinea con el bando nacional, que es el más cercano a sus ideas. Si se considera, además, el trato que reciben sus familiares en la zona republicana, tampoco es como para extrañarse. Y como en mayor o menor medida esto lo hizo todo el mundo, en unos años muy difíciles que juzgamos desde la comodidad de 2021, no es un argumento para privarle de ningún honor público. Si lo hacemos con él, habría que hacerlo con todos.

¿Hay más informes como el de Viñas?

No, que yo sepa. Y como digo, ese informe no demuestra nada.

"Deberíamos ser menos engreídos con nuestros antepasados y no hacer juicios presentistas"

¿Se equivoca la Secretaría de Estado de Memoria Democrática con su dictamen?

Quiero pensar que solo se equivoca y que no se trata en realidad de depurar póstumamente a Juan de la Cierva por sus ideas. Pero dado el procedimiento elegido, con un informe plagado de conjeturas, que además no ha sido sometido a un informe contradictorio, es difícil no pensar lo segundo.

Siguiendo con esta lógica, ¿podrían exigir que el aeropuerto de Barajas deje de llevar el nombre de Adolfo Suárez por su relación con el franquismo?

Establecido el absurdo, cualquier cosa es posible. Lo destacable es que esa vara de medir tan rígida no se la aplican las autoridades memorialistas a los dirigentes del bando republicano. Ni siquiera Azaña pasaría ese corte tan rígidamente establecido para Juan de la Cierva. De ahí que sea absurdo hacer juicios presentistas de un pasado que nosotros no vivimos. Nuestros padres construyeron una democracia sobre una experiencia trágica; deberíamos ser menos engreídos con nuestros antepasados. No sabemos qué habríamos hecho nosotros de vivir aquellos años tan difíciles.

El PP acusa al Gobierno de España de usar la Ley de Memoria Histórica para reescribir la Historia, ¿está de acuerdo?

No en esos términos. La Historia se reescribe constantemente. El problema es que se nos quiere imponer, con los recursos del poder público, un relato sin fundamento histórico. Ese relato en realidad resucita un motivo propagandístico del bando republicano: el que nuestra Guerra Civil fue una lucha entre fascistas (el bando nacional) y demócratas (el bando republicano). Nadie mínimamente informado creyó, por entonces, semejante cosa.

¿Cree que el aeropuerto se terminará llamando ‘Juan de la Cierva’ tarde o temprano?

Si no se llama así significará que habrán triunfado los que quieren depurar póstumamente a nuestros antepasados sencillamente porque no les gustan sus ideas.