Jornada maratoniana la de ayer en el Pabellón Juan Antonio Corbalán de Caravaca, donde fueron citados 2.000 vecinos del casco urbano y la pedanía de Archivel para realizar un cribado selectivo, debido al aumento de casos durante los últimos días. Se trata de la segunda medida que toma Salud Pública, la primera fue el cierre del interior de la hostelería hasta el próximo miércoles.

«El objetivo de esta medida es contribuir a cortar la cadena de transmisión y evitar decisiones por parte de las autoridades competentes de carácter restrictivo, que conllevan un perjuicio para la economía y la libertad de la personas y que queremos evitar a toda costa, buscando el necesario equilibrio con la protección de la salud de todos», puso de manifiesto el alcalde de Caravaca, José Francisco García, quien hizo un nuevo llamamiento a la sociedad caravaqueña, «la implicación y la contención deben ser generalizadas por parte de toda la población y especialmente férrea en los próximos días con el fin de seguir disminuyendo la incidencia».

La tendencia se sitúa en descenso. De los 67 afectados en la jornada del miércoles, se pasó a 63 ayer jueves, lo que supone una bajada de 10 en los últimos tres días del total de casos en seguimiento. Actualmente hay 53 positivos en el casco urbano, con 3 positivos en las últimas 24 horas, y 10 en las pedanías, con cero nuevos en las últimas 24 horas.

La epidemióloga del Servicio Murciano de Salud coordinadora de este cribado, Natalia Cabrera, destacó la colaboración vecinal y el buen funcionamiento del dispositivo, reforzado con facultativos del 061 y agentes de la Policía Local. Como máximo en 48 horas se conocerán los resultados.