La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado sendas investigaciones para averiguar la identidad de los propietarios de dos perros, uno de los cuales apareció preso en un cepo junto a una urbanización de Murcia, tal y como ya informó LA OPINIÓN, y el otro en una balsa de riego de Atamaría-Cartagena que, gracias a la colaboración ciudadana, fueron rescatados.

La operación ‘Arana’ ha culminado con la instrucción de diligencias como investigadas a dos personas, un varón, de 69 años y vecino de Murcia; y una mujer, de 59 años y vecina de Cartagena, como presuntas autoras de delito de abandono animal.

En Murcia

La investigación se inició cuando una asociación animalista comunicó a la Guardia Civil el rescate de un perro, que un vecino de una urbanización del municipio murciano había hallado preso en un cepo en los aledaños de su domicilio.

Varios vecinos de la zona colaboraron en la liberación del animal y lo entregaron a la asociación animalista que se encargó de su traslado hasta un centro veterinario, donde le fue amputada una de sus extremidades debido a la grave herida provocada por la trampa.

El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil inició una investigación para identificar y localizar al propietario del animal, que ha culminado recientemente con la instrucción de diligencias a un vecino de Murcia, como presunto autor de delito de abandono animal.

La Guardia Civil mantiene la investigación abierta para identificar a la persona que colocó el cepo en el medio natural, ya que se trata de un método de caza prohibido.

En Atamaría-Cartagena

Otra denuncia, puso en conocimiento de la Benemérita el rescate de un perro de una balsa de riego ubicada en Atamaría-Cartagena. El hallazgo se produjo cuando unos excursionistas escucharon los alaridos de un animal que se encontraba en el interior de una balsa sin posibilidad de escape.

Después de realizar varias maniobras para intentar su rescate y a la vista del riesgo que el animal corría en la zona, estos primeros testigos reclutaron a numerosas personas, así como cuerdas y anclajes, para lograr su extracción que, finalmente, resultó exitosa.

Las gestiones practicadas por el SEPRONA han permitido identificar a la propietaria del animal, una vecina de Cartagena, que recientemente ha resultado investigada como presunta autora de delito de abandono animal.

Las dos personas investigadas y las diligencias instruidas han sido puestas a disposición de los juzgados de Instrucción de Murcia y Cartagena.