El Consejo de Gobierno puede considerarse prácticamente en funciones. La dimisión de la consejera de Transparencia, Beatriz Ballesteros, ha precipitado la remodelación del Ejecutivo regional constituido el 1 de agosto de 2019. La portavoz del Ejecutivo y coordinadora autonómica de Ciudadanos, Ana Martínez Vidal, anunció ayer que los cambios en el Ejecutivo que se producirán tras la renuncia de Ballesteros no afectarán solo a los consejeros nombrados por su partido, que tiene cuatro asientos en el Consejo de Gobierno, sino también a los del Partido Popular. La crisis se produce, además, antes de que esté cerrada la negociación entre los socios para aprobar los presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2021, lo que abre nuevos interrogantes.

La máxima responsable de Ciudadanos ya había adelantado a La Opinión en unas declaraciones publicadas el pasado martes que tenía intención de realizar «una remodelación integral» en las consejerías de Ciudadanos que no afectaría solo a los nombres, sino también a la distribución de las competencias entre los distintos departamentos.

El pacto de coalición firmado por el PP y Cs en 2019 asignó a la formación naranja las carteras de Empleo, Investigación y Universidad; Empresa, Industria y Portavocía; Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social; y Transparencia, Participación y Administración Pública.

Por su parte, el PP tiene las de Presidencia y Hacienda; Educación y Cultura; Salud; Fomento e Infraestructuras; Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente; y Turismo, aunque en esta última consejería hay también altos cargos nombrados por Ciudadanos.

No es la primera vez que Martínez Vidal anuncia que la remodelación del Gobierno regional abarcaría también los puestos que ocupa el PP, pero la sustitución de Ballesteros ha abierto la puerta a los cambios en el Ejecutivo que ella lleva reclamando desde hace meses. La portavoz avanzó ayer en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que ambos partidos «trabajan» en la remodelación y señaló que los cambios podrían producirse «en los próximos días».

Respecto a la sustitución de la vicepresidenta, la consejera de Cs Isabel Franco, Martínez Vidal respondió que los cambios corresponden al presidente, Fernando López Miras.

La pretensión de Martínez Vidal es sustituir a Isabel Franco como número dos del Ejecutivo. La coordinadora autonómica remite al ejemplo de los demás gobiernos autonómicos de coalición entre el PP y Cs, en los que el máximo responsable regional de la formación naranja ocupa la vicepresidencia del Ejecutivo.

Por su parte, Isabel Franco ha mantenido su negativa a ceder la vicepresidencia a su nueva responsable autonómica del partido y ha dejado claro en todo momento que no seguiría como consejera si dejara de ser la numero dos del Gobierno, aunque conservaría su escaño en la Asamblea Regional.

López Miras ha tratado de sortear las pretensiones de la coordinadora autonómica de Cs en previsión de que las tensiones internas en la formación naranja agraven las dificultades del Ejecutivo para conseguir los apoyos que requiere cualquier iniciativa, dado que los socios de Gobierno no tienen mayoría absoluta y deben contar siempre con el voto del Grupo Parlamentario de Vox.

La portavoz recordó que los cambios competen al presidente, aunque será ella quien deberá comunicarle a López Miras el nombre del sustituto de Ballesteros cuando lo tenga decidido su partido, una circunstancia que «aún no se ha producido», según dijo.