El jefe delÁrea de Neonatos del Virgen de la Arrixaca de Murcia, José Juan Agüera, confirma que ha habido un fuerte descenso en la natalidad, aunque algunas voces augurasen que a raíz de marzo (cuando se decretó el primer estado de alarma, el que implicaba confinamiento domiciliario) se produciría un baby boom.

El doctor explica que, aunque en otras circunstancias históricas se ha dado este fenómeno demográfico (por ejemplo, tras la Segunda Guerra Mundial), puntualiza que «entonces no había Facebook, ni Instagram ni televisión».

Asimismo, achacha el descenso a la circunstancia «emocional» que va aparejada a la covid. Alude, por ejemplo, a los ERTE y precisa que «a la hora de plantearse tener hijos, quizás mucha gente no está en su mejor momento».

Detalla el médico que entre 2010 y 2020 se ha detectado un descenso en torno al 17,5% en la natalidad en la Región, del cual «casi el 9% se ha producido en los tres últimos años». «La crisis sanitaria ha sido la puntilla», afirma Agüera, que, preguntado sobre qué puede pasar estos meses, dice que se augura «un repunte a partir de marzo», aunque «va a depender de las vacunas» y de la evolución de la tercera ola.

Inestabilidad económica y vital

En la misma línea se expresa la psicóloga Felipa Gea cuando apunta que «la inestabilidad económica y personal que vivimos desde hace años, desde la crisis del 2008, tiene bastante que ver en la decisión de embarcarse a tener un retoño». «El miedo a que la situación laboral y económica sea peor que la que teníamos antes de esta pandemia, está provocando miedo y que la gente sea más precavida», manifiesta.

A su juicio, «mucha gente ha visto que la cultura del esfuerzo es un fracaso, que es mentira que esforzándote siempre se consiguen las cosas». «Quizá sea esta lucidez una de las causas que está provocando que la gente sea más precavida en esta nueva crisis. Todo ello a través de un miedo a cómo va a acabar esto y cómo voy a acabar yo», hace hincapié.