Tres son los centros educativos concertados con jornada partida que en este inicio de curso marcado por la covid han decidido cambiar el horario escolar para que sea continuo y disminuir así el riesgo de contagio entre padres y alumnos en las entradas y salidas del colegio. Este riesgo no es menor con una jornada continua en vez de partida, según señaló Salud Pública hace unas semanas, pero la recomendación era disminuir la movilidad, el transporte y la afluencia de gente. Estos tres centros, Capuchinos, AYS y Maristas (con sede en Murcia y Cartagena) han servido de aliciente para una protesta de padres que cada vez va a más en los pocos concertados de la Región que mantienen horario partido, mañana y tarde, para los alumnos de Infantil y Primaria.

Tanto es así, que la delegación en Murcia de la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y padres de Alumnos ha recibido ya correos de protesta de padres de distintos centros sustentados con fondos públicos, así como el apoyo de la mayoría de las AMPA a las que representa, que piden jornada continua para sus centros. Las últimas quejas llegan desde el colegio Salzillo en Molina de Segura, así como Las Claras del Mar Menor, Los Alcázares.

En esta encrucijada de los padres hay distintas formas de llevar a cabo la protesta: algunos optan por la recogida de firmas digitales a través de la plataforma change.org, o incluso amenazan con dejar de pagar las 'cuotas voluntarias' a la asociación de padres y madres del colegio o la fundación del centro. Este último caso llega desde el colegio Santa Joaquina de Vedruna de Cartagena, donde los padres han convocado para el próximo lunes una cacerolada frente al centro como protesta ya que el equipo directivo, señalan, «no atiende nuestras demandas». Reconocen que optaron por un centro como este porque la jornada partida les beneficiaba, pero en un curso tan excepcional como este quieren reducir la posibilidad de contagio con la menor presencia posible en el colegio o en los accesos.

En el centro Villa Pilar de Santo Ángel, en Murcia, una petición a través de la plataforma change.org lleva recogida 500 firmas de padres para solicitar al centro el cambio a la jornada continua. «Lo hemos solicitado a través del AMPA pero el centro no ha dado una respuesta oficial», señala una madre a esta redacción. «No aporta nada a los niños que estén más de ocho horas en el colegio entre clases, recreo y comedor con la mascarilla puesta».

El colegio Franciscano La Inmaculada de Cartagena ya dejó claro en un comunicado a los padres que el horario se mantendría igual, mañana y tarde. «Si la Consejería dicta alguna instrucción clara al respecto, se actuará conforme a lo que la administración educativa decida». Esa instrucción es reclamada por las AMPA y la patronal educativa estaría dispuesta a cumplirla, pero insisten en que no sea obligatoria sino solo una recomendación.