La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJRM) ha desestimado el recurso presentado por el submarinista de una empresa de acuicultura que pidió la incapacidad tras sufrir un accidente en una inmersión, del que no se dan más detalles en la sentencia.

El juzgado de lo social de Murcia al que correspondió su demanda declaró probado que aquel solicitó la incapacidad permanente total o, subsidiariamente, parcial, al considerar que no estaba en condiciones de desarrollar su trabajo como lo había hecho hasta el momento de sufrir el accidente.

El juez desestimó la reclamación, que planteó también contra la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS), el Instituto Social de la Marina y una mutua, al declarar que la patología de carácter psíquico que alegaba era consecuencia de sus rasgos constitucionales y no derivaba de los efectos sufridos en la inmersión.

Señalaba igualmente que la causa de sus dolencias no procedía del accidente laboral sufrido.

Ahora, el TSJRM, al rechazar su apelación, comenta que no sufre hipoacusia, ni mareos, ni acufenos ni, tampoco, alteraciones neurológicas, por lo que nada impide que pueda trabajar.