El pleno de la Asamblea Regional de ayer estuvo marcado por la retirada de la moción del PP en la que pedía al Gobierno central que estableciera medidas legislativas necesarias para «proteger» a las embarazadas sin recursos «evitando de esta manera las interrupciones voluntarias del embarazo» y darles «el mayor apoyo psicológico y económico posible»de forma que puedan seguir adelante con la gestación.
La diputada popular y defensora de la moción, Patricia Fernández, explicó que su grupo no quiere que la moción sea «utilizada» por otros partidos para «justificar» la negativa a firmar el Pacto Regional contra la Violencia de Género, cuyo texto está acordado entre todos los grupos pero cuya ratificación no secundará Podemos, mientras que PSOE lo condiciona a que el Gobierno regional retire el anteproyecto de Ley de Protección de la Familia, que considera el aborto como un «fracaso».
