El consejero de Salud, Manuel Villegas, cifró ayer en 3.133 los trabajadores afectados por asbestosis, enfermedad ligada a la exposición al amianto, en la Región de Murcia, lo que supone un incremento frente al informe de 2016, en el que se constató la existencia de 2.442 afectados, de los cuales 400 ya habían fallecido.

En su comparecencia ante la Comisión de Sanidad y Asuntos Sociales de la Asamblea Regional, Villegas señaló que en 2016 había 546 personas expuestas y 1.896 posexpuestas al fibrocemento, mientras que en el registro concluido el actual mes estas cifras eran de 893 expuestos y 2.240 posexpuestos, aunque no detalló si ha habido una variación en el número de bajas mortales.

El consejero de Salud se mostró contrario a la petición de Podemos y la asociación de afectados APENA de que las autopsias a los afectados por amianto sean realizados mediante la técnica médico-clínica, porque «no tiene valor legal» y el juez que dirima si ha habido una muerte por exposición al amianto en el lugar del trabajo no admitirá las muestras.

En este sentido, Villegas aseguró que la Dirección General de Salud Pública (DGSP) ha abogado por que las autopsias sean realizadas por forenses siguiendo las recomendaciones de la UE, ya que es el único profesional cuyas resoluciones tienen validez legal ante una reclamación judicial de las familias para que sea considerada enfermedad profesional la causa de muerte del trabajador.

Así, ha defendido el convenio firmado en julio de 2017 con el Ministerio de Justicia para que un forense tome muestras de los pulmones de los fallecidos y se envíen al hospital Vall D'Hebrón de Barcelona, centro de referencia en esta materia, además de defender la mejora del protocolo en la Mesa de Trabajo constituida por la DGSP, APENA y neumólogos del Servicio Murciano de Salud. Sin embargo, la diputada de Podemos María López apostó por la autopsia médico-clínica, tal y como recomienda la Sociedad Española de Anatomía Patológica, para evitar el «calvario judicial» que tienen que pasar los familiares.