Social

La expulsión de un inmigrante obliga a la Policía Local a intervenir en el campamento del Hospital Naval de Cartagena

El Ayuntamiento pregunta a la Delegación del Gobierno por qué no acudieron las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y pide explicaciones de lo sucedido

Tres inmigrantes abandonan las instalaciones del antiguo Hospital Naval.

Tres inmigrantes abandonan las instalaciones del antiguo Hospital Naval. / Iván Urquízar

La Policía Local registró la noche del miércoles una serie de llamadas de los vecinos de las inmediaciones del Hospital Naval alertando de que se estaba produciendo una especie de amotinamiento multitudinario en el acceso a las instalaciones del campamento temporal de inmigrantes y pedían la intervención de los agentes ante una situación que generaba incertidumbre, inseguridad y preocupación.

Todo se originó por la decisión de los vigilantes del complejo de expulsar a uno de los inmigrantes atendidos en el campamento por causas que se desconocen. Así lo ha explicado la alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, al valorar la intervención policial en el asunto. “La unidad de mando de la Policía Local que estaba trabajando en la jornada de noche decidió enviar cinco unidades a las inmediaciones del Hospital Naval y poder intervenir inmediatamente en la situación que se estaba generando”, ha explicado, dejando claro que ha pedido la información de todo lo sucedido a la Delegación del Gobierno y todavía no ha recibido respuesta.

Al parecer, la decisión de los vigilantes del campamento originó que aproximadamente unos ochenta migrantes que se encontraban en las instalaciones se enfrentaran a los vigilantes para evitar la expulsión. A su llegada, los agentes municipales intervinieron apoyando a los vigilantes de seguridad, mediando en el enfrentamiento y bajando la tensión. “Quiero agradecerles el trabajo que desarrollaron anoche, porque lo tuvieron que desarrollar sin ningún tipo de apoyo en esa situación de Policía Nacional ni de Guardia Civil, solamente intervino en este incidente nuestra Policía Local”, ha señalado Arroyo, quien ha añadido que los agentes municipales avisaron a la ONG Accem, que es la que se encarga del dispositivo de atención en el Naval, y escoltaron al migrante en cuestión hasta la Hospitalidad de Santa Teresa, donde finalmente durmió.

El suceso ha llevado a la regidora a preguntarse “qué habría pasado si no se desplaza la Policía Local al campamento e interviene apoyando a los vigilantes en esa situación de conflicto y de amotinamiento en un recinto que, como se ha podido comprobar y como veníamos diciendo, no está preparado para garantizar la seguridad en el interior ni para atender a más de 700 personas”. También afirma que “concentrar a más de 700 inmigrantes en un campamento temporal en el Hospital Naval no soluciona el problema de inmigración, lo que hace es agravar el problema y puede conllevar a problemas de convivencia y conflicto social”. Así, cree que la preocupación que tienen los vecinos “es lógica”.

Reunión inmediata

La alcaldesa ha avanzado que este jueves, “por enésima vez”, se volverá a dirigir al Ministerio de Inclusión Social pidiendo una reunión inmediata “para que nos hablen de cuál es el dispositivo que se ha habilitado en Cartagena”. También quiere conocer quién se hace responsable en estos momentos si ocurre algo en Cartagena. “Sabemos que desde que está el dispositivo del campamento temporal de inmigrantes han salido de la instalación 1.400 personas, pero no sabemos si se han quedado en Cartagena, si están en otro lugar y si necesitan algún tipo de apoyo por parte de servicios sociales del Ayuntamiento de Cartagena, porque no tenemos información”.

Además, reclama información sobre por qué no acudieron las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado al incidente. “Que no haya sucedido todavía nada grave no significa que no se pueda producir”, ha indicado. Por eso, han pedido más efectivos de Policía Nacional y de Guardia Civil, así como más control sobre el dispositivo dentro del recinto, porque los propios vigilantes de seguridad no han sido capaces de gestionar la situación.

Delegación del Gobierno: "No hubo ningún problema"

La delegada del Gobierno en la Región de Murcia, Mariola Guevara, ha afirmado que el Hospital Naval de Cartagena, en el que se encuentran acogidos entre 600 y 700 inmigrantes, no sufrió este miércoles ninguna situación "preocupante" y que, por tanto, "no hubo ningún problema".

A preguntas de los periodistas durante una rueda de prensa, Guevara ha explicado que el Ayuntamiento de Cartagena comunicó que la Policía Local tuvo que acudir a estas instalaciones después de que un vecino avisase al Cuerpo por "algo que escuchó".

"Yo he hablado con los responsables que gestionan este centro y no hubo ningún problema", ha aseverado Guevara, que ha explicado que se trató de un asunto "de régimen interior" ante "algo que puede suceder habitualmente".

En este sentido, ha concretado que situaciones de esta índole se producen cuando los educadores deciden que "alguno de los chavales no debe de continuar ahí porque a lo mejor tiene alguna conducta inapropiada en un momento puntual".