Cartagena

Hartos de baches y aceras rotas en el Barrio de la Concepción

Una veintena de vecinos espera ya dos años el arreglo de zonas que se han convertido en un peligro para los viandantes

El accidente de un niño esta semana ha reactivado las reclamaciones

Las aceras y el asfalto de la calle Azucena del Barrio de la Concepción se encuentran en un estado «nefasto», según los vecinos.

Las aceras y el asfalto de la calle Azucena del Barrio de la Concepción se encuentran en un estado «nefasto», según los vecinos. / IVÁN J. URQUÍZAR

Más de dos años esperando que el Ayuntamiento atienda sus demandas. Es el plazo que llevan esperando una veintena de vecinos de la calle Azucena del Barrio de la Concepción de Cartagena para que se arregle la vía, plagada de baches y aceras rotas. Y es que, en mayo de 2022 presentaron de forma colectiva las instancias individuales redactadas por los residentes para provocar una reacción del Gobierno local, ya que sus reclamaciones superan el lustro.

Así lo explicó a La Opinión uno de los reclamantes, quien recordó que hace aproximadamente ese tiempo que se arreglaron las calles del barrio pero se dejó fuera esta vía, que une la calle Dalia y la Rambla y que actualmente presenta un estado «nefasto». De hecho, ya en los escritos presentados en 2022 se concretaba que la acera estaba completamente deteriorada y desgastada, con visibles agujeros, bordillos rotos, es totalmente intransitable para las personas y que puede crear un serio riesgo para las personas, tanto de caídas como de torceduras de tobillos.

Las instancias presentadas incluían la denuncia de que «las personas que transitan por dicha acera se tienen que bajar a la carretera (con el peligro que puede generar de atropellos), ya que la acera se encuentra en tan mal estado que no se puede ir por la misma».

Afirmaban los vecinos que la acera «es totalmente impracticable para carritos de bebés y, sobre todo, para sillas de ruedas».

Los residentes también ponían el foco sobre el asfalto de la vía, que «se encuentra también muy desgastado y con desniveles, y en la unión con la acera hay agujeros con el peligro que eso acarrea». Además, se criticaba el crecimiento de «abundantes plantas en esos agujeros, acumulándose la suciedad». Finalmente, los reclamantes indicaban que «de todo lo relatado se dio cuenta a la Policía Local, la cual emitió un informe sobre el mal estado de la calle».

En aquellos escritos solicitaron que la acera fuera reparada «a la mayor brevedad posible para evitar daños a las personas que transitan por ella» y «que se arregle el asfalto de la calle para evitar caídas y que se acumule la suciedad y que crezcan las plantas en el mismo».

Unas reclamaciones que han vuelto a actualizarse al no haber dado solución al problema, que se ha agravado con el paso de estos años. De hecho, hace apenas unos días un niño sufrió un incidente en la calle al caer con su bicicleta tras meter una de sus ruedas en un agujero junto a una arqueta.

Uno de los residentes indicó que «han acudido técnicos a ver el estado de la calle y han dicho que eso requiere una fuerte inversión que hay que incluir en los presupuestos municipales, pero nada más; y no vemos que se incluya».

Además de los escritos, los vecinos también enviaron hace apenas dos semanas avisos al servicio de respuesta rápida para reparar desperfectos en las calles, pero los baches siguen allí.