El Colegio de Ingenieros urge a la restauración del faro de Podaderas

Invertir en su conservación y contribuir a atraer turismo y generar riqueza. Son los principales objetivos que han puesto sobre la mesa desde el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos con la publicación de hasta 111 obras públicas de todo el país que precisan de una intervención urgente. Una lista que pone el foco en el faro de San Juan de Podaderas, que se encuentra en el monte Galeras, en su vertiente de costa.

El presidente del Colegio, Miguel Ángel Carrillo, ha explicado que este catálogo de 111 nombres debe contribuir a una mayor vertebración territorial y económica a través del turismo y del patrimonio ingenieril, que en España se remonta a la época de los romanos. Así, para el faro de Podaderas, que está en una situación de abandono, la institución colegial considera «imprescindible» implementar medidas de rehabilitación y puesta en valor.

Y no es el Colegio de Ingenieros el único colectivo que ha puesto el foco sobre esta obra de ingeniería que data del siglo XIX. Ya que Hispania Nostra, asociación cuya finalidad es la defensa, salvaguarda y puesta en valor del Patrimonio Cultural Español y su entorno, lo incluyó en su Lista Roja en 2021 debido a «su estado de abandono y su expolio actual».

Según la web del colectivo, el estado que presenta la construcción es «regular, gracias a que la construcción es recia». No obstante, precisan que «carece de puertas y ventanas que la protejan de los agentes exteriores», por lo que, pese a que el acceso al faro es complejo, nada impide que los visitantes puedan entrar. También las inclemencias del tiempo puede llegar a afectar aún más al estado del inmueble.

El faro se ubica en el complejo de construcciones que existen en el monte Galeras, en la parte más cercana al mar y en las proximidades a la batería de Fajardo y a la propia que da nombre al faro, la de San Juan de Podaderas. También cuenta con el Fuerte de Navidad en las cercanías. La obra de ingeniería está compuesta por una torre ligeramente cónica, de color amarillento, y la linterna es prismática y pintada de verde. Para subir a ella se empleaba una escalera de caracol emplazada sobre una planta cuadrada. Ésta, a su vez, albergaba un edificio vivienda con alojamiento para las dos familias de los fareros. Torre y edifico quedaban rodeados por una pequeña explanada de unos tres metros a su alrededor. La construcción era de sillería en el zócalo y cadenas en los cuatro ángulos.

Otras edificaciones en peligro

Junto al faro de Podaderas, la lista roja de Hispania Nostra incluye, entre otras construcciones, las baterías defensivas de San Leandro, Roldán, Cenizas, Podadera, De la Chapa, Aguilones, Fajardo y La Parajola, así como las torres de Oviedo, Navidad, del Moro y del Negro, junto a los castillos de San Julián, Despeñaperros, de los Moros y Atalaya. En cuanto a edificios civiles y religiosos, la lista incluye las ermitas del Monte Miral, el molino de viento de las Salinas de Marchamalo, la torre Garcipérez, el panteón de Manuel Picó y Juan Cresco, en el cementerio de Los Remedios, los molinos de viento del Campo de Cartagena y Villa Calamari.