Plaga
El plan de Cartagena para atajar la plaga de mosquitos
Las administraciones han acordado secar las zonas encharcadas en la rambla perimetral situada junto salinas de Marchamalo, donde se ha acumulado agua de lluvia
La plaga de mosquitos está suponiendo un auténtico problema en distintos puntos de Cartagena, sobre todo en las localidades de costa. Ante la situación, las administraciones han puesto en marcha la maquinaria para tratar de dar una solución al problema. Este martes se reunieron miembros de la Consejería de Medio Ambiente, ANSE, la Concejalía de Sanidad y Belmonte Ambiental, la empresa encargada de la fumigación y el control de plagas en el municipio.
Estos acordaron coordinar la desecación de determinadas zonas en las que se ha visto que hay acumulación de agua dulce, como en el entorno de las salinas de Marchamalo, donde se reúnen este miércoles nuevamente para determinar las zonas exactas y así poder actuar «inmediatamente».
Desde el Ayuntamiento se va a poner la infraestructura, a través de Bomberos e Hidrogea, para disponer de una cuba para bombear ese agua, según explicaron fuentes municipales a La Opinión.
En concreto los encharcamientos se han producido fuera de las salinas viejas que gestiona ANSE, en la rambla perimetral. El director de dicha asociación, Pedro García, explica que "esta agua dulce se acumula como consecuencia del taponamiento del ramblizo pasó bajo la carretera entre La Manga y las urbanizaciones al sur del Mar Menor". Una zona que ANSE ha pedido que se desbroce en un futuro para impedir que se vuelvan a repetir episodios similares en un futuro. Dentro de las salinas el agua dulce pudo evacuarse de forma satisfactoria gracias al sistema de compuertas con el que cuenta.
García también ha querido recordar que los mosquitos no solo se generan en esa zona, pues "hay otros puntos en la ribera sur del Mar Menor y en el entorno de las urbanizaciones de La Manga en los que se han producido aportes de agua procedente de la red de alcantarillado cuando colapsó durante el episodio de lluvias".
Desde ANSE consideran que "si el agua encharcada se hubiera tratado inmediatamente después de la lluvia, se habría reducido el desarrollo de la población de mosquitos".
Por otro lado, durante la reunión también se propuso una futura colaboración en Calblanque, para que la Comunidad permita al Ayuntamiento entrar puntualmente en el espacio protegido y así poder actuar en las zonas en las que se producen encharcamientos.
A esta solución se suma el plan municipal de refuerzo para fumigar y desinsectar determinadas zonas del litoral y el núcleo urbano que comenzó ayer por la madrugada y que se extenderá hasta el 11 de agosto. El Consistorio también ha intensificado los tratamientos larvicidas en la zona urbana, así como en los espacios naturales de la Marina del Carmolí, Lo Poyo y Calblanque.
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