La Opinión de Murcia

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Viernes de Dolores

El Ayuntamiento incrementa a 50.000 euros su ofrenda de la Onza de Oro al Hospital de la Caridad

La alcaldesa pide, con motivo del día grande de la patrona, "apoyo para rehabilitar la Basílica de la Caridad"

Durante el acto de la entrega de la Onza de Oro Ivan urquizar

La alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, entregó este Viernes de Dolores la tradicional Onza de Oro al Santo y Real Hospital de Caridad. La dotación económica para apoyar a los enfermos y los más necesitados se ha incrementado a 50.000 euros, frente a los 35.000 que se entregan habitualmente. Asimismo, la regidora pidió el “apoyo para culminar las obras de rehabilitación de la Basílica”. 

Con este acto abrió el telón el Viernes de Dolores, día grande de la Virgen de la Caridad. La Basílica abrió sus puertas a primera hora de la mañana para acoger a cientos de fieles cartageneros, felices y emocionados por volver a ver a su patrona. Sin embargo muchos de ellos, algo mosqueados, no pudieron acceder puesto que el aforo estaba limitado debido a las obras que se están acometiendo en el templo. Todos ellos pudieron seguir el evento a través de una pantalla gigante situada a las puertas del templo. "Dejadme estar en la entrada aunque sea", exclamó una vecina malhumorada al guardia de seguridad. 

A las 11.00 horas partió en comitiva la Corporación Municipal desde el Palacio Consistorial hacia la Caridad. Trompeteros, maceros, porteros y policías ataviados con sus uniformes de gala acompañaron a la alcaldesa, tenientes de alcalde, portavoces y concejales El son de las trompetas marcó el inicio de la marcha. A su paso por la Calle Mayor, la regidora daba los buenos días a los cartageneros, que respondían alegres y efusivos, pues es un día grande. El concejal más joven de la Corporación, Álvaro Valdesueiro, se encargó de portar el pendón de la ciudad.

Así, en torno a las 11:40 horas, con la llegada de la comitiva a la Basílica, dio comienzo la misa, oficiada por el Obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes. En su homilía recordó a “aquellos que nos dejaron durante la pandemia” e imploró por “la intercesión de la Virgen de la Caridad por la paz de Ucrania”. Asimismo, agradeció “el esfuerzo realizado al Hermano Mayor del Hospital de la Caridad, José Vera, por acercar a la patrona al pueblo pese a las obras que se están llevando a cabo en la Basílica”. El Obispo terminó su discurso exclamando un “¡Viva la Virgen de la Caridad!”, que obtuvo una sonora réplica del público. 

Posteriormente, la alcaldesa hizo entrega de la Onza de Oro, una tradición que data del año 1762 y que simboliza la aportación económica que realiza todos los años el Ayuntamiento de Cartagena en favor de los enfermos pobres del hospital. Debido a las obras, este año la ofrenda no se realizó en el altar, sino en la Capilla de San José, lugar en el que reside en estos momentos la imagen de la patrona. 

“Tras dos años de silencio, con la procesión del Cristo del Socorro de la pasada madrugada, Cartagena se ha reencontrado con la más querida de sus tradiciones. A la emoción de volver a disfrutar de la Semana Santa, se suma la alegría por regresar a tu Basílica. Tu Santo y Real Hospital ha realizado un enorme esfuerzo para mejorar su seguridad y engrandecerla. Su trabajo merece nuestro aplauso y necesita de la ayuda de todos para poder culminarlo”, destacó la alcaldesa en su discurso.

“Hoy tu pueblo desfilará de nuevo ante ti, celebrará con flores y música a su patrona. Vendrán de barrios y diputaciones para agradecer el amparo que nos diste cuando la pandemia oscureció nuestras vidas y para pedirte por los que se nos fueron y sus familias”, añadió.

Arroyo también recordó “el horror de la guerra de Ucrania” y resaltó “la caridad de los cartageneros para enviar ayuda urgente a las víctimas y acoger a las familias que dejan atrás su casa, su patria y a sus seres queridos”.

La alcaldesa elevó también sus peticiones a la Virgen. “Cartagena superó con solidaridad la crisis sanitaria, pero sus consecuencias sociales, extendidas en el tiempo y agravadas por la situación internacional, exigen nuevos sacrificios. Cartageneros del campo, de la mar y de muchos otros oficios observan angustiados el retraso de la recuperación por la que tanto han luchado. 

La regidora pidió a la patrona “destreza, inteligencia y acierto” para “afrontar con éxito los retos comunes”. “Los cartageneros nos exigen unidad y la merecen, para avanzar en la recuperación del Mar Menor y para disponer de más oportunidades y empleo. La historia ha demostrado que los cartageneros somos capaces de llegar muy lejos si avanzamos unidos y con el mismo objetivo”, añadió.

En su intervención, la alcaldesa ha recordado que el año que viene se cumplen tres siglos de la presencia de la Virgen de Caridad en la ciudad y que, con ese motivo, Cartagena celebrará el Año de la Patrona. “Protégenos hasta entonces y ayúdanos a realizar nuestros propósitos”, pidió Arroyo. 

El presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, llamó a "disfrutar de esta Semana Santa tan esperada después de dos años sin procesiones", y subrayó que las expectativas son "máximas", en referencia a las previsiones de alojamientos turísticos. "Tenemos prácticamente el cien por cien completo en reservas de alojamientos en Murcia, Cartagena y Lorca, al igual que en los alojamientos rurales", resaltó el jefe del Ejecutivo regional.

En cuanto a la celebración del día de la patrona de Cartagena, López Miras afirmó que "teníamos que estar aquí, en Cartagena, mostrándole nuestra devoción y nuestro respeto a la Virgen en su basílica", y recordó que, recientemente, el Gobierno regional destinó 250.000 euros para la rehabilitación del templo.

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