«Le ha tocado la lotería», dice José Antonio Martínez, presidente de la Asociación de Modernistas de Cartagena de Levante, cuando piensa en el municipio de Alcoy, Alicante, que va a presidir la nueva Asociación Nacional de Entidades Modernistas (ANEM) al contar con una sede en la que poder celebrar las conferencias y reuniones entre las trece entidades de toda España asociadas, entre ellas la de la ciudad portuaria. «Traducido a dinero, esto son miles de euros de gente que irá a los eventos modernistas», añade.

Un cargo que tendría que haber ostentado la Asociación de Cartagena por ser la impulsora de esta iniciativa, encontrarse en la segunda ciudad más modernista de España (la primera es Barcelona) y por ser la entidad de este estilo más antigua y de las más numerosas de la Península. «Desgraciadamente la Asociación ha tenido que renunciar a presidir dicha Entidad Nacional al no contar con apoyo municipal ni sede. Cartagena pierde muchos de miles de euros en concepto de turismo cultural y gastronómico. Parece difícil entender que se renuncie a llenar nuestros hoteles y restaurantes», lamenta Martínez, ya que miembros de la ANEM tendrán que hospedarse en la ciudad en la que se encuentre la sede cada vez que haya reunión administrativa, conferencias o actos convocados.

Aun no presidiendo la Asociación, calculan que a partir de ahora acudirán a los actos que organicen en el Campo de Cartagena, al menos, unos 700 miembros de las trece entidades de la ANEM porque ha sido creada para aunar sinergias, difundir, conservar y proteger el patrimonio modernista de cada una de ellas.

Esta unión entre grupos modernistas cuenta con la colaboración de trece municipios como son los de Comillas, Alcoy, Torre Pacheco, Sada o Benicassim.

«La Asociación Modernista de Cartagena de Levante inició este proyecto nacional en el 2018 junto a dos ciudades más. Esto estaba en conocimiento del Ayuntamiento de Cartagena desde su comienzo y solo nos han dado falsas esperanzas. En los últimos tiempos incluso nos han sacado del programa subvenciones para entidades culturales. Me consta que es por antipatía hacia nuestro movimiento», explica el presidente de los modernistas cartageneros. Este proyecto también lo conoce el Gobierno de la Comunidad Autónoma, que le indicó a Martínez que sin el apoyo municipal «ellos no pueden entrometerse».

En cambio, fuentes del Consistorio informan de que tras años de no justificar en qué invertía el dinero de las subvenciones la Asociación Modernista, le pidieron un informe con las actividades realizadas y su coste a cambio de obtener la subvención. No la ha recibido porque todavía no lo ha entregado, confirman.

Desde Cartagena no pierden la esperanza y por haber sido los promotores y fundadores de la ANEM han reservado la posibilidad en los estatutos de traer la sede a Cartagena si en un futuro pudieran contar con un lugar adecuado. El grupo cartagenero señala el gran foco turístico que supone la Muestra Modernista de Cartagena, que este año sería la número VI, y todavía el consistorio no ha confirmado si la podrán realizar.