Cartagena suma dos nuevas piezas a su extensa colección de objetos de época púnica. Se trata de un compás y un escudo que, según los primeros análisis de los arqueólogos municipales, están asociados al momento de la toma de la ciudad por parte del general romano Escipión, cuando Qart Hadast estaba a punto de ser conquistada por los romanos, un momento clave en la historia de la ciudad portuaria.

Este hallazgo se producía de manera inesperada cuando se estaba llevando a cabo una intervención arqueológica en la muralla con la intención de actualizar la puesta en valor de esta infraestructura, catalogada como Bien de Interés Cultural. Cuando los arqueólogos realizaban un proceso de ortofotografía de la muralla, para poder recrear posteriormente un modelo en tres dimensiones del monumento, hallaron suelos de tierra y estructuras tanto de época romana como púnica. Fue ahí cuando tuvo lugar el descubrimiento de estos dos objetos que se suman al patrimonio púnico y romano de la antigua Qart Hadast (y a punto de pasar a ser Cartago Nova).

Ahora, según indicó la alcaldesa y responsable del Área de Patrimonio, Ana Belén Castejón, los expertos continúan trabajando e investigando para cerciorarse del origen del compás y el escudo, que serán catalogados por el equipo de Patrimonio Arqueológico. La regidora de la corporación municipal incidió en que «estos nuevos objetos aportarán más luz a otra época clave de la historia de Cartagena» y confesó estar «maravillada con los descubrimientos de esta nueva intervención arqueológica, que pueden llevarnos hasta la toma de Qart Hadast por parte del general romano Escipión».

Las obras de mantenienieminto de esta infraestructura, autorizadas por Castejón y financiadas por el Consistorio por un valor de casi 41.500 euros, han hecho posible el hallazgo de los objetos, que no se podrían haber encontrado de otra manera.

Limpieza y mantenimiento del histórico muro

El yacimiento donde se encuentra ubicado el resto de la Muralla Púnica protegido pertenece al lugar donde se encontraban las puertas de Qart Hadast. Fue levantado mediante dos muros paralelos de grandes sillares de arenisca procedente de Canteras. Para mantenerlo en condiciones óptimas ha sido necesario acometer tratamientos de limpieza y consolidación de sus estructuras para conseguir estabilizar los restos arqueológicos. También se han retirado morteros de intervenciones previas y se ha cepillado y aspirado el muro.