El lujoso yate del príncipe saudí Abdul Aziz Bin Fahd lleva desde mayo en los astilleros que Navantia tiene en Cartagena. La empresa ha preferido no dar detalles sobre los trabajos que se van a realizar a este barco de 147 metros de eslora y 18 de manga.

Aun así, fuentes consultadas por LA OPINIÓN desvelan que la embarcación se encuentra bastante anticuada por dentro y está aquí para modernizada. Por el momento no se conoce cuándo se van a concluir los trabajos, aunque avanzan que está previsto que siga en Cartagena una larga temporada.

El mal estado del interior del barco puede deberse a las innumerables fiestas que hacía a bordo el príncipe. Era frecuente verlo atracado en el puerto de Ibiza, donde Abdul Aziz pasaba los veranos junto a su séquito.

El príncipe era considerado como uno de los turistas que más gastaba en las Pitiusas. Este verano ha sido el primero de muchos en los que ha faltado a su cita con la isla. Algo de lo que se han resentido los comercios locales. Junto a este yate, llamado 'Prince Abdulaziz', solía viajar también otro pequeño barco, en el que iba un gran séquito de mujeres que contentaban los deseos del príncipe. Nada se sabe de Abdul Aziz desde que abandonó Ibiza de forma repentina, hace justo un año, cuando fue requerido por el actual monarca, su tío Salman bin Abdulaziz, por sus posicionamientos críticos hacia los actuales gobernantes.

El país ha hecho recientemente una purga entre la clase más pudiente para acabar con la corrupción. Varios miembros de la realeza han pasado varios meses encarcelados en un hotel de lujo de Riad hasta negociar un exilio.