Los hosteleros confirmaban ayer lo que se estaba escuchando durante los últimos días: unos 200 locales, principalmente en el centro de la ciudad, no abrirán el sábado. Así lo anunciaba el presidente de Hostemur, Jesús Jiménez, quien explicaba que la medida fue aprobada por unanimidad en una reciente asamblea de Hostemur ya que el sector se enfrenta «al momento más difícil de la historia de la hostelería en Murcia» tras la presentación, por parte del Consistorio murciano, del informe del Mapa de Ruidos, que recoge tres nuevas Zonas de Protección Acústica Especial (ZPAE), que calificó de «arbitraria».
La intención de la patronal con esta iniciativa, apuntaba Jiménez, es que Murcia «siga siendo la ciudad que es, con mejoras pero sin perder la esencia que la hace tan especial». Para ello, pedía ayer a los murcianos y turistas que visiten la ciudad el sábado que «nos apoyen» y no consuman en los establecimientos y locales de la ciudad. Y es que, señalaba, la medida pretende mostrar «cómo sería una Murcia sin hostelería». El cierre afectará «a todo el sector» y todas las franjas de servicio, tanto bares, cafés o restaurantes como pubs y discotecas, y se extenderá desde primera hora de la mañana del sábado hasta la mañana del domingo.
Además, adelantaban desde la patronal sus disculpas por los inconvenientes que pueda ocasionar este 'cierre de persianas' que se produce coincidiendo con una de las jornadas del festival WARM UP, que tiene lugar este fin de semana en la capital del Segura. Aún así, para garantizar que se cubran las necesidades de comida y bebida de los asistentes, tanto en el recinto como en las plazas en las que se han programado actuaciones habrá establecimientos abiertos.
Jiménez aseguró que esta medida «nos produce una profunda tristeza», además de «cuantiosas pérdidas», ya que la hostelería «prácticamente vive de los fines de semana», por lo que «no abrir un sábado es poner en riesgo la viabilidad de los negocios».
El presidente de Hostemur lamentó que llevan «muchos meses» aportando propuestas que faciliten la convivencia pacífica entre los implicados, como la puesta en marcha de un modelo de terraza que elimine los toldos y permita la retirada de todo el mobiliario al final de la jornada, la creación de una unidad especial de Policía municipal dedicada a la actividad de la hostelería o la realización de campañas de concienciación para que los murcianos aprendan a hacer «un uso adecuado de la vía pública». La asociación se encuentra a la espera de que la Delegación del Gobierno dé su aprobación para una concentración el sábado, en una ubicación aún por confirmar.
Sorpresa en el Ayuntamiento
El concejal de Promoción Económica, Jesús Pacheco, calificó de «precipitado» el paro convocado por Hostemur, según informó Europa Press, al tiempo que aseguraba que desde el Consistorio «estamos dispuestos a sentarnos cuantas veces haga falta para explicarles las dudas que puedan tener de la propuesta, que aún está en periodo de estudio las alegaciones».
Por su parte, el grupo municipal Ciudadanos pedía al alcalde, José Ballesta, la convocatoria urgente del Consejo Sectorial del Ruido para tratar de acercar posturas entre las partes afectadas.
