El Servicio de Parques y Jardines, dependiente de la Concejalía de Modernización de la Administración, Calidad Urbana y Participación, ha establecido un completo plan para prevenir y eliminar la oruga procesionaria, una plaga entre los pinares del Mediterráneo.

Para evitar que haya cualquier peligro en los parques y jardines de Murcia, el Ayuntamiento cuenta con una treintena de jardineros de zona que vigilan e inspeccionan los 2.600 pinos del municipio para controlar su presencia, que se suman a los dos equipos de fitosanitarios se encargan de tratarlos.

Desde la Concejalía se recuerda que en caso de ver alguna oruga de la procesionaria no se debe pisar ni tocar bajo ningún concepto, ya que pueden originar problemas en la piel y en las vías respiratorias.