La concejala de Comercio y Relaciones Institucionales, Maruja Pelegrín, presentó ayer al resto de grupos políticos del ayuntamiento de Murcia el borrador del Reglamento regulador de la denominación y rotulación de vías y espacios públicos y numeración de edificios, convirtiéndose, cuando fuese aprobado, en la primera ordenanza al respecto en el municipio de Murcia. El objeto de esta nueva normativa pasaría por la asignación y modificación del nombre de las calles y espacios públicos, así como de los de titularidad privada que sean de uso público y los que, siendo de uso privado, deban tener denominación por requerir numeración de fincas o edificios.

Esta ordenanza, según el borrador entregado a los distintos grupos políticos para su estudio y trabajo, recoger los criterios para la asignación de nombre de las calles; el procedimiento para tal denominación; así como todo lo relacionado con la composición y funcionamiento de la Comisión de Calles. La ordenanza también cuenta con un capítulo de deberes y responsabilidades como, por ejemplo, la obligación de «no alterar ni ocultar el rótulo de las vías y espacios urbanos, así como las placas de numeración de las fincas y edificios». En el caso de incumplimiento podrán imponerse multas coercitivas, cuya cuantía será de 300 euros. El borrador señala que, si el incumplimiento persiste, la cuantía se incrementará en un 20% por cada periodo de 15 días, hasta el límite máximo de 3.000 euros.

Si procede, a Pleno

  • En la reunión de ayer también se acordó que las denominaciones de calles que se aprobaron en la última Comisión de Calles, pero que no fueron aprobadas en Pleno, debido a las elecciones municipales, se remitan a las juntas municipales para que éstas decidan si las ratifican o no. En el caso de que se ratificaran serían estudiadas en la próxima Comisión de Calles y aprobadas, si procede, en Pleno.