Su departamento es de nueva creación y ella se estrena en este quinto mandato del alcalde Cámara con una amalgama de responsabilidades derivadas de otras concejalías y relacionadas directamente con su formación académica y experiencia laboral (es ingeniera de Caminos). Pese a su inexperiencia en política tiene claras tres o cuatro cosas básicas, que le ayudarán a desempeñar su tarea como concejala de Vía Pública, Oficina Técnica de Arquitectura (OTA), Oficina Técnica de Ingeniería (OTI), Servicios Industriales, Planificación Urbana e Infraestructuras.

Una de ellas es que el teatro Romea no puede seguir cerrado sin una fecha en el horizonte para subir el telón y afirma, tajante, que «hay que desbloquear el conflicto que existe entre los arquitectos de la OTA (una de sus responsabilidades de Gobierno) y la UTE (Unión Temporal de Empresas) que se encarga de las obras de remodelación». Es más, añade Ana Martínez Vidal, «será una de mis prioridades». Como también lo será la creación de «una gran oficina de proyectos», en la que estarán aglutinados todos los servicios que intervienen en las actuaciones municipales, que en estos momentos están dispersos. Se trata de los técnicos que están adscritos a la OTA, la OTI, los Servicios Generales de Infraestructuras, los Servicios Industriales y las obras de urbanización en cuanto a su ejecución, ya que la planificación seguirá dependiendo de Urbanismo, que ostenta el nuevo concejal Juan Antonio Bernabé.

Esta nueva oficina estará dirigida por Martínez Vidal, que tiene la intención de implantar en la Administración local el sistema de trabajo de «cualquier consultoría privada». «En las empresas de consulting, los técnicos están todos juntos y trabajan en equipo porque se trata de sacar adelante proyectos multidisciplinares», resaltó la concejala de Vía Pública, quien explicó que todos los servicios técnicos se trasladarán al nuevo edificio de Abenarabi (conocido como nueva Gerencia o edificio de Servicios a la Comunidad), ocuparán una planta única del inmueble y trabajarán codo con codo y en equipo como en la empresa privada. El objetivo es agilizar las actuaciones y aprovechar los recursos públicos.

La nueva concejala de Vía Pública tiene en cartera otros asuntos importantes como el cierre del anillo de circunvalación a Murcia con la terminación de las dos costeras (norte y sur) y de la autovía del Reguerón. En ese sentido, avanza que antes de final de año saldrán a licitación los 12 tramos de la segunda fase de ambas costeras y añade que «lo primero que voy a hacer en próximos días es reunirme con los 1.700 afectados de la autovía del Reguerón». Sobre la construcción de nuevas infraestructuras que mejoren la conexión con las pedanías, afirma que será necesaria una modificación del Plan General de Ordenación Urbana para planificar las iniciativas y los futuros ejes radiales que sean prioritarios. En la llegada del AVE a la ciudad también es tajante, así como en la construcción de carriles-bici, que apoya. «Yo apuesto por el soterramiento de las vías del tren y voy a intentar que sea así», en referencia a la intención de Fomento de remodelar la actual estación del tren para el tren de alta velocidad y así no soterrar las vías. «Eso seguiría siendo una barrera para el desarrollo», recalcó la edil, que no tiene claro cómo llegaría el tranvía a El Palmar sin quitar la barrera del tren del barrio del Carmen.