La polémica surgida con la peatonalización de la calle de la estación en Molina de Segura continúa después de haber finalizado la semana de pruebas. De hecho, el pasado lunes fueron depositadas en el consistorio alrededor de 450 firmas en contra de la posibilidad de que el corte al tráfico sea definitivo.

La iniciativa fue promovida por uno de los comercios de la zona que se ha visto afectado, al que se han sumado numerosos establecimientos además de vecinos que están en desacuerdo con esta medida. Las razones fundamentales por las que no apoyan una futura peatonalización son: que se eliminarán decenas de plazas de aparcamiento, la pérdida económica de los comercios al eliminar el tráfico rodado y, por último, que las calles cercanas no están preparadas para soportar el volumen de tráfico que sufre la calle Estación.

Al respecto, el alcalde de la localidad, Eduardo Contreras, ha señalado que ahora es momento de analizar la situación porque es importante no perder la estructura comercial del municipio. Y añade que la peatonalización es una idea comprometida y será fundamental contar con la opinión de los comerciantes: «Convertir la calle en peatonal no es una inversión prioritaria y, si perjudica económicamente el comercio del municipio, no se hará», explicó.

El edil destacó que la Asociación de Vecinos Barrio Centro se ha prestado a recoger opiniones de los vecinos sobre un tema que, además, se debatirá en asambleas de la junta de participación ciudadana.