El Gobierno iraquí confirmó ayer que el líder de Al Qaeda en Irak, el jordano Abu Musab al Zarqaui, ha resultado herido, y anunció un nuevo plan de seguridad para proteger la capital iraquí contra los ataques terroristas. La confirmación fue hecha por el ministro de Interior iraquí, Bayan Yabr, quien afirmó que los organismos de seguridad de su país "recibieron informaciones hace cinco días según las cuales Zarqaui está herido".

Yabr, en una rueda de prensa ofrecida en Bagdad, junto al ministro de Defensa, Sadun al Duleimi, no facilitó detalles sobre el paradero de Zarqaui, considerado el hombre más buscado en Irak, y por cuya cabeza EE UU ofrece 25 millones de dólares.

Sus afirmaciones se producen mientas reina la confusión sobre el estado de la llamada 'Organización de Al Qaeda para la Guerra Santa en Mesopotamia', tras los comunicados atribuidos a este grupo terrorista en los que se facilitaban informaciones contradictorias sobre el nombramiento de un nuevo líder.

Sadun al Duleimi explicó que el nuevo plan de seguridad será aplicado en Bagdad a partir del próximo sábado y que en el mismo participarán más de 40.000 soldados del Ejército y efectivos de las fuerzas 'Maghauir', un cuerpo especial de la Policía iraquí.

"Una semana después de la puesta en práctica del plan en la capital, aplicaremos uno similar en la provincia de Al Abnar", considerada uno de los principales feudos de la insurgencia suní, añadió el ministro de Defensa.

"El nuevo plan tiene como principal objetivo cambiar nuestra posición de la defensa al ataque", dijo Bayan Yabr.