ElPozo forzó el tercer partido de cuartos de final tras imponerse con contundencia al Magna por 7-3 en un choque en el que demostró que lo acontecido una semana atrás solo fue un error. En un encuentro duro por la presión que suponía saberse contra las cuerdas y poder acabar la temporada a las primeras de cambio, el conjunto murciano superó al equipo navarro tras imponer su pegada y clase. La afición respondió como en las grandes citas acompañando a la escuadra murciana en un duelo que se resolvió a favor de aquel que más quiso llevarse el partido.

El equipo local arrancó con intensidad. Quería salir a morder a su rival desde el principio y logró dar un bocado al Magna a los dos minutos, cuando Matteus enganchó una volea que se coló entre las piernas del meta visitante. La tensión podía cortarse, como se pudo comprobar por la tangana que se montó entre varios jugadores por una falta cometida sobre Eseverri y que se saldó con cartulina para Lima y Araça. Con el enfrentamiento, los navarros lograron enfriar en parte el choque. A pesar de calmarse las aguas, era ElPozo el que apostaba por el gol, algo que logró por medio de Bebe primero y Lima después. No se había llegado al ecuador del primer tiempo y las sensaciones y el resultado no podían ser más favorables para los de Duda, que creían en la victoria y daban los pasos correctos para conseguirla. La afición hacía ruido y era la primera medida de presión del conjunto anfitrión, algo que estaba dando resultados. El Magna no se encontraba, buscaba salidas rápidas y atropelladas mientras que a su rival no le quemaba el esférico y lo buscaba para hilvanar jugadas que, aunque no siempre finalizaban con un lanzamiento a puerta, sí demostraban que apostaban por ganar deleitando. La lluvia de ocasiones no cesaba sobre la meta navarra cuando llegó el cuarto de Álex. Los visitantes habían perdido el rumbo del encuentro cuando saltó Víctor como portero-jugador, todavía en la primera parte, y poco después Usín recortaba distancias con dos tantos en un minuto que dejaron descolocado al cuadro local. Lo habían hecho bien, pero esa distancia que parecía insalvable había quedado reducida a algo más factible para un Magna que veía esperanza en el horizonte cuando enfiló el túnel de vestuarios.

En el segundo acto, los visitantes apostaron por la misma táctica que tan buenos resultados les había dado al final de los primeros veinte minutos y jugaron con cinco para cuatro buscando reducir distancias. Sin embargo, Álex enfrió los ánimos navarros y encendió los de los aficionados con un quinto gol que daba traquilidad al cuadro murciano. Los de Arregui se volcaron sobre la meta de Fabio, pero no lograban superar el entramado defensivo dispuesto por Duda. ElPozo, por su parte, realizaba posesiones largas, apoyadas en una acertada circulación de balón aunque no conseguía finalizar las jugadas con un disparo a puerta. Hasta que Lima hizo el sexto dejando prácticamente sentenciado el choque cuando todavía restaban diez minutos para la conclusión. A pesar de que el equipo capitaneado por el sempiterno Eseverri bien podría haber bajado los brazos y dedicarse a guardar fuerzas para el último partido, lo cierto es que siguieron intentándolo incluso después de haber encajado un nuevo tanto, lo que da fe del carácter competitivo de un equipo que venderá cara su derrota.

Al final, victoria para ElPozo que iguala un enfrentamiento cuyo ganador se medirá a un Barça que ya espera rival en semifinales tras imponerse ayer con comodidad al Santa Coloma.