El centrocampista murciano Armando Ortiz jugó la segunda parte del encuentro ante el Valladolid B que acabó con triunfo murcianista con el tabique nasal fracturado como consecuencia de un golpe que recibió al filo del descanso. Los servicios médicos del club lograron taponar la hemorragia sobre el terreno de juego y el futbolista pudo disputar la segunda parte, pero después del choque, ya en frío, empezó a notar molestias en la zona, por lo que ayer mañana fue examinado y se le diagnosticó una «fractura del tabique nasal sin desplazamiento». Por ello, el mediocentro no tendrá que pasar por el quirófano, en cuyo caso se habría perdido los dos próximos meses de competición, pero sí que deberá jugar a partir de ahora con una protección especial. Por fortuna, el futbolista no recibió ningún golpe en la misma zona en la segunda parte del choque. Armando tendrá el jueves la máscara que le están diseñando para que pueda jugar sin ningún problema.
