Noise Box llevan desde el año 2000 haciendo ruido y dejándose la piel en los escenarios. Ahora presentan su cuarto album, Every Picture of You Is When You Were Younger (Son Buenos 2016), financiado por crowdfunding y producido por Raúl de Lara y Antonio Navarro (AMA Estudios). Jesús Cobarro, cantante del grupo, nos habla de sus esperanzas y proyectos.

- Parece que soplan buenos vientos para Noise Box. ¿Cuáles son vuestras expectativas? ¿Qué tal está siendo la acogida del disco?

Llevamos mucho tiempo haciendo música, y hemos aprendido a no hacernos castillos en el aire. Nos vamos poniendo metas a nivel artístico, eso sí, pero no nos planteamos qué podemos conseguir a nivel de repercusión mediática o aceptación del público, ya que normalmente eso hace que te desvíes de lo realmente importante, y puede ser frustrante cuando te marcas objetivos poco realistas. Hay cosas que por supuesto nos gustaría que ocurrieran, pero dependen de demasiados factores como para preocuparnos demasiado por ellas. Por supuesto, nos interesa llegar a más gente, enamorar oídos y seguir creciendo. Hacemos por conseguirlo, pero nuestros esfuerzos se centran más en crear algo de lo que podamos sentirnos orgullosos. Por ahora nos está llegando un feedback muy positivo del disco, y eso desde luego es una alegría enorme para nosotros.

- El título del disco es una frase del ya fallecido cómico estadounidense Mitch Hedberg. ¿Qué os motivó adoptarla como título?

A mí me encanta el humor de Mitch Hedberg, y recuerdo que hace unos años, cuando estaba viendo uno de sus monólogos y soltó esa frase, me hizo mucha gracia, pero a la vez me recordó lo fugaz que es todo. Es cierto que a veces, echando un vistazo a nuestras fotos, nos damos cuenta de que todo pasa muy rápido, e incluso las que hicimos hace poco tiempo muchas veces dejan patente que las cosas cambian a ritmo vertiginoso.

- Raúl de Lara y Antonio Eriatarka (AMA Estudios) se han encargado de la producción. ¿Estáis orgullosos del resultado? Se os aprecia rebosantes de alegría; aún así, los inicios ¿se recuerdan con melancolía? ¿Hay algún «y si€» o algo que sientas que ha quedado por hacer?

Estamos muy contentos con el resultado final, que es fruto de los esfuerzos combinados de Raúl, Antonio y del grupo. Hubo mucho trabajo previo de preproducción por mi parte, de forma que cuando presentamos la premaqueta a Raúl, los conceptos estaban ya muy claros, y no ha habido prácticamente cambios a nivel de estructura de canciones o arreglos. Raúl, desde ese punto, ha sido el arquitecto sonoro para conseguir convertir esa premaqueta en un disco, siendo capaz de interpretar nuestro boceto y saber cómo sacarle el máximo partido a las canciones. La labor de Antonio Navarro se ha centrado más en el mastering, aunque también estuvo presente en las sesiones de grabación y aportó ideas durante todo el proceso. En general, todos hemos trabajado con mucho esmero y cariño, y eso creo que se nota en el disco. En cuanto a los inicios, yo creo que los recordamos con cariño, pero no con melancolía. Realmente estamos en un gran momento, disfrutando mucho y con una conexión entre nosotros que se ha ido forjando a lo largo de los años, así que cuesta mirar atrás con melancolía. Es cierto que a veces pensamos que si tuviésemos menos responsabilidades, como cuando éramos más jóvenes, quizás podríamos plantearnos hacer más cosas con el grupo y dedicarle más tiempo, pero en nuestros inicios teníamos otras dificultades, así que al final es cuestión de adaptarse a cada momento. De momento no pensamos en las cosas que nos han quedado por hacer, sino en lo que nos queda por hacer en el futuro.

- ¿"Every Picture of You Is When You Were Younger" abre el camino hacia territorios más atmosféricos?

Bueno, es difícil de predecir ahora mismo. Siempre nos han gustado mucho las atmósferas, lo que ocurre es que ahora hemos tenido oportunidad de incluir en nuestro equipo efectos que amplían mucho nuestras posibilidades a la hora de crear esos ambientes. Lo que sí es seguro es que seguiremos buscando formas de conseguir distintas texturas que renueven nuestro sonido. Aunque estemos muy contentos con el sonido de este disco, lo más probable es que queramos que el siguiente suene diferente, pero es pronto para saberlo. Cuando algún día nos ponemos a improvisar en el local, sí que tendemos a acabar tocando cosas que suenen explosivas a la vez que atmosféricas, pero quizás cuando pasen unos meses, lo que busquemos sea radicalmente distinto, quién sabe.

- ¿Qué nuevos elementos musicales habéis introducido en este disco? Escuchando con detalle las canciones, parece que ha habido una gran labor de producción, ensamblando todos los trocitos como si de un collage se tratara. ¿Cuál es la base del concepto que recorre todo el disco?

Hemos jugado con más efectos de guitarra para crear un mayor abanico de colores y texturas. Hay momentos en los que las guitarras suenan a teclado, o a un híbrido entre sinte y guitarra, que es algo que nos gusta mucho. No tiene sentido hacer sonar una guitarra como un teclado sin más... Lo interesante es aprovechar las características sonoras de la guitarra y hacer algo que conserve ese carácter, pero que a la vez no sea tan reconocible y tenga un punto más original. Antes nos acercábamos más al sonido de guitarra noventero en las distorsiones, mientras que ahora las partes más cañeras se alejan del sonido rock puro para buscar otras formas de buscar el impacto sonoro. Quizás lo que comentas del collage se deba a que en cada canción usamos muchos más sonidos en cada instrumento que en trabajos anteriores. Es cierto que en el disco la labor de Raúl ha sido clave a la hora de que en la mezcla todos los sonidos se distingan como deben, pero esa riqueza sonora también está presente en el directo, por lo que no lo vemos tanto como un collage, ya que las distintas partes de las canciones van fluyendo más que estar colocadas como en un puzzle.

- Escuchando el disco no parece que haya habido un cambio radical respecto a vuestro sonido más reciente, pero sí que presentáis nuevas texturas más ambientales y que habéis consolidado los cimientos de vuestra personalidad musical. ¿Sabéis ahora con mayor claridad que nunca lo que queréis? ¿Hay una sensibilidad más pop?

En este disco, sin haber hecho algo radicalmente vanguardista o innovador, sí hemos pretendido sonar con un punto original y buscar sonido que no sea tan fácil reconocer en otras bandas. Hay un componente de experimentación, aunque al combinarlo con melodías vocales que beben del power-pop y del indie-rock entre otros géneros, a veces queda algo maquillado. Creo que una de las cosas que se podrían considerar como base de nuestra personalidad sonora es nuestra manera de incluir melodías bonitas que se podrían considerar más pop en un envoltorio sonoro menos estándar y con toques experimentales.

- Magic" es una canción que parece transmitir euforia. Jesús, ¿Te resulta más fácil contenerte o pasarte de rosca en las canciones?

La verdad es que todo depende del momento en que te encuentres y lo que te apetezca hacer. Para el directo apetece mucho tener un repertorio con buenas dosis de euforia, porque ese subidón de adrenalina es una de las cosas que perseguimos los músicos, pero los temas contenido son muy importantes para nosotros también. Quizás en directo no puedes abusar de este tipo de canciones para que no decaiga demasiado el ritmo del concierto, pero no concibo un disco de Noise Box sin que haya algunas canciones así. Además, nos gusta muchísimo crear contrastes, y si todas las canciones tuvieran la misma euforia, no destacaría tanto. El hecho de que "Magic" vaya después del crescendo de "Transit" creo que potencia esa euforia mucho más que si fuera detrás de otro tema más frenético.

- Supongo que el hecho de mostrarte menos atormentado ahora es un reflejo de tu actual situación personal, ¿no?

Sí, claro. Supongo que es síntoma de madurez y de estar menos perdido que antes, pero también hay momentos oscuros a lo largo del álbum. Al final un disco es como una foto emocional de la época que estás viviendo. En él se pueden apreciar los claroscuros emocionales de lo que uno está viviendo en el momento de componer las canciones.

- ¿Qué idea estética crees que transmite el disco en los oyentes?

En última instancia, el disco pretende transmitir algo que ya se ha tratado muchas veces en la música, la idea de vivir el presente, pero desde un punto de vista no tan hedonista y quizás algo más trascendental. Hemos querido usar la nostalgia para subrayar la importancia de vivir cada momento al máximo antes de que se escape, y, en cierta manera, perdura la idea que ya esbozábamos en nuestro EP "Chaos, Sweet Chaos" de que la belleza de la vida reside tanto en las cosas bonitas como en las amargas, en el contraste que provocan.

- Habéis hecho grandes discos; el problema ha sido llegar al público. ¿Qué hace falta para tener mayor repercusión fuera de nuestra comunidad? ¿Hay más posibilidades en el mercado internacional? ¿Os lo habeis planteado? ¿Qué os empuja a vosotros a seguir?

No sabemos exactamente qué hace falta, es un cúmulo de cosas. Una impresión que tenemos es que en este país no hay la misma cultura musical que en otros, lamentablemente. Yo, como profesor de EOI, de vez en cuando uso canciones en mis clases, y te sorprendería la cantidad de gente que no ha oído hablar en su vida de David Bowie, Radiohead, The Cure o The Smiths, y estoy hablando de personas con mi edad de media, no de adolescentes. También me encuentro con muchísima gente a la que simplemente no le interesa la música en absoluto, lo cual me cuesta muchísimo entender. Por lo tanto, es normal que sea difícil abrirse camino con la música en un país en el que los que la valoramos somos una minoría. A la gente le cuesta ir a conciertos, sobre todo a descubrir música nueva. Hay poca curiosidad y sobre todo, hay una tendencia a aceptar como bueno lo que los medios apoyan en lugar de poner bandcamp patas arriba buscando artistas que nadie más conozca pero que a ti te parezcan una maravilla. Por supuesto, hay gente que es lo contrario, de hecho en nuestro círculo de amistades la gente es lo opuesto a lo que estoy describiendo, y eso a veces te crea la falsa sensación de que a la gente sí le interesa la música, pero cuando sales de ese círculo de amistades y de los bares y salas de conciertos que frecuentamos, te das cuenta de que los apasionados de la música somos unos bichos raros. Creo que hay demasiada separación entre el mainstream y el underground. Casi echo de menos la época en la que podías ver un videoclip de Rage Against the Machine justo detrás de uno de Mariah Carrey en los 40 principales. Ahora el gran público está ajeno a todo lo que suene menos estereotipado, y cualquier propuesta que se aleje de lo convencional queda relegado al subsuelo de inmediato. Incluso dentro del indie hay un indie-mainstream que es el que vende entradas de festivales. Desde luego, creemos que nuestra música podría tener mayor acogida fuera de nuestras fronteras, y de hecho nuestro sello, Son Buenos, ya está pensando en maneras de traspasarlas, aunque nos haría mucha ilusión que nuestra música y la de muchos otros grupos que nos encantan tuviesen mayor protagonismo en nuestro país.

- No sois ni novatos ni veteranos (bueno, esto último un poco si), ni clásicos ni modernos. ¿En qué punto creéis que os encontráis ahora mismo?

Estamos en un punto en el que conservamos la energía de nuestros comienzos, pero en el que nos enteramos más de la película, somos más conscientes de lo que somos. Es una situación un tanto extraña, porque tenemos toda una trayectoria detrás que casi todo el mundo fuera de nuestra región ignora, por lo que siempre tienes la sensación de ser veterano y recién llegado a la vez. Cuando un grupo tiene éxito comercial, imagino que sus decisiones artísticas se tomarán en base a un mayor número de factores; el público y la crítica espera algo de ti, sin embargo nosotros hemos podido evolucionar sin tener eso mucho en cuenta, sólo pensando que teníamos que mejorar y disfrutar, por lo que se puede decir que hemos creado una personalidad sonora y artística muy sólida a lo largo de estos años.

- ¿Qué pasó con el castellano ? ¿No os convenció la experiencia?

A veces nos preguntan por ello. "Almas de Destrucción Masiva" fue un EP que nos ayudó a quitarnos una espinita que teníamos clavada, pero al final se reduce todo a lo que piden las canciones y lo que te pide el cuerpo de forma natural, y en mi caso es el inglés. Pasar mi infancia en Inglaterra y tener un trabajo tan vinculado al idioma y la cultura anglosajona hace que en general, suela escribir y leer más en inglés que en castellano, y siempre he escuchado más música en inglés que en castellano también, lo cual es lógico simplemente por volumen de artistas que cantan en ese idioma.

- Lo primero que supimos de "Every picture " fue, cuando tirasteis adelante una campaña de crowdfunding para poder financiarlo. ¿Os ha aportado algo que creáis que no tendríais sin la ayuda de los colaboradores? ¿Os planteáis repetir? ¿Qué valoración haces meses después de aquella campaña de micromecenazgo? ¿Cómo surgió la iniciativa? ¿Realmente era necesaria para poder afrontar los costes del proyecto? ¿Qué te gustaría que pasara con Noise Box? ¿Hay alguna meta marcada?

Al principio tuvimos nuestras dudas, entre otras cosas porque no teníamos nada claro que fuéramos a conseguirlo, y eso habría sido un golpe bastante duro. Desde luego, habría sido prácticamente imposible grabar el disco sin el crowdfunding, sobre todo en las condiciones que lo hemos hecho. Además de lo que conseguimos recaudar, hemos tenido que invertir de nuestro bolsillo también, y haber asumido el coste completo de grabar, masterizar y fabricar habría sido totalmente inviable. Además, nos ha aportado la energía que necesitábamos, porque al responder la gente, ves que hay personas que quieren escuchar esas canciones que tienes en la cabeza y te da un empujón hacia adelante. La verdad es que estamos muy agradecidos con todas las personas que pusieron su granito de arena, y esperamos que ellos estén contentos de haber sido parte del proyecto. Para próximos trabajos no descartamos repetir la experiencia, pero todo dependerá de qué posibilidades haya en ese momento.

- Muchos grupos se han fijado y os han tenido como referentes, y ahora que parece que la escena de la que formáis parte y fuisteis iniciadores está en un gran momento, ¿qué os parece a vosotros?

Bueno, nosotros no nos consideramos iniciadores, ya que ha habido muchos grupos antes que nosotros que abrieron camino. Por ejemplo, Second y Ross fueron de los primeros que demostraron que se podían hacer discos en inglés con un aire más internacional desde la huerta del Segura. Schwarz por ejemplo nos parecen unos gigantes que siempre están a un paso por delante de los demás (en general, no solo en Murcia). Es cierto que sí hemos sentido eso que dices de haber sido referente para otras bandas, y es una de las satisfacciones más grandes que un músico puede sentir, sobre todo cuando muchas de esas bandas hacen canciones que te dejan con la boca abierta. Hay muchos grupos con los que tenemos una admiración mutua, o nosotros lo percibimos así, como The Lawyers, Viva Suecia, Neon Lights, Those y muchos otros. A nosotros nos parece que la escena goza de una gran salud. Lo que sería maravilloso es que la música independiente en sí tuviese la importancia y relevancia que de verdad se merece, porque nos da la sensación de que la gente se está perdiendo a muchos grupos increíbles, y que es una lucha tremenda para los músicos independientes sacar adelante su proyecto sin apenas respaldo.

-¿Qué queda (musical y personalmente) de aquellos jóvenes que debutaron hace 16 años ? ¿Ha llegado la hora de Noise Box? -¿Puedes adelantarnos algo del espectáculo que estrenaréis en la presentación?

Somos los mismos que hace 16 años, pero con más experiencia. Si hubiésemos cambiado en esencia, quizás no existiría ya el grupo. Nuestra manera de vivir la música sigue intacta, y creo que han cambiado más nuestras circunstancias que nosotros mismos. No sé si ha llegado la hora de Noise Box, pero sí sentimos que estamos en un momento lleno de energía, y si sabemos canalizarla bien, pueden salir grandes cosas. El concierto en la Sala Rem va a ser muy especial para nosotros, porque hace mucho que no tocamos en Murcia, y creemos que nuestro público va a notar un salto importante. Vamos a centrarnos en el nuevo álbum, aunque también repasaremos algunos temas de discos anteriores, actualizando el sonido de éstos para que encajen bien en el set. También tendrá importancia el apartado visual. Vamos a hacer algo muy especial contando con nuestro público, y creemos que va a ser una noche muy bonita y con emociones fuertes.