Se ha de suponer que cuando se creó La Llave de Oro del Flamenco, según se deduce de su simbología, la entrega de esta llave a un cantaor o cantaora conllevaría, como dice el profesor sevillano José Francisco López, «la conservación y pureza en la transmisión del cante flamenco». La historia sobre cuándo y a qué cantaores se le otorgó este preciado galardón comienza en el año 1862, siendo el cantaor Tomás 'El Nitri' quien la recibió. Un artista carismático quien, a la sazón, era sobrino y discípulo del cantaor gitano apodado El Fillo. Comentarios sobre la Llave de Oro del Flamenco fueron prolijos en el tiempo, siendo casi unánime la opinión en lo que se refiere a lo justo o no de tal otorgamiento, debido al proceder y las formas, pues la fórmula para conceder dicho premio no siempre fue a través de una competición entre los artistas de la época. Nos contaba don Francisco Vallecillo, director de la revista Flamenco, que «la primera llave de Oro fue otorgada a El Nitri por un grupo de amigos. Y tras el Nitri, durante muchos años, pasaron numerosas figuras inmensas en el cante gitano andaluz, en una época de rica creación como no se ha repetido más, y a pesar de ello -decía el señor Vallecillo- no se volvió a hablar de la llave del Cante.

Siendo algo más de medio siglo después (1926) cuando un empresario madrileño le otorgó como homenaje la Llave a Manuel Martínez de Pinillos, Manuel Vallejo. Esta llave, al igual que la del Nitri, fue concedida sin que mediara ninguna competencia». La tercera llave la consiguió en 1962, esta vez sí en competición con otros cantaores, el cantaor sevillano Antonio Mairena, habiéndose celebrado para ello un concurso en la ciudad de Córdoba. En esta ocasión, el señor Vallecillo decía que «la Llave no puede ser un Oscar que se disputa anualmente o una Copa o un Diploma. Es? la Llave. El reconocimiento de una dignidad ad vitam. Y Antonio Mairena será la llave del cante mientras viva».

Treinta y ocho años después la Llave de Oro del Flamenco le fue otorgada, a título póstumo, a José Monje Cruz, Camarón de la Isla, a instancia de la Diputación Provincial de Cádiz. Y cinco años después la Diputación Provincial de Málaga solicitó que este galardón se le concediera al cantaor cordobés Antonio Fernández Díaz, 'Fosforito'.

El profesor José Francisco López, en su artículo dedicado a la Llave de Oro del Flamenco (2007), comenta: «No seré yo, un casi analfabeto flamenco, quien ponga ningún reparo desde estas páginas a los cantaores, pero ¿quién debe otorgar la Llave de Oro del Cante, si es que se debe entregar un premio como ese? ¿No sería mejor sustituirlo por otro donde se reconozcan los méritos de determinados, poquitos, muy poquitos, cantaores?»; y, al hilo de lo comentado por el profesor José Francisco López, sin entrar en las claves que determinan la concesión de esta llave, somos de la opinión de que continuar con las fórmulas hasta ahora seguidas para conseguir este prestigioso galardón, se pierde el objetivo primordial, dado que un artista (un cantaor o cantaora) debería conocer y saber interpretar 'todos los cantes flamencos', pues es sobradamente conocido de que en el amplio mundo del flamenco estilos de haberlos, ahílos en cantidad (más de cien). Haciendo un análisis algo más detenido, no tenemos claro si debe haber una sola llave (de oro) que premie el saber de un cantaor o cantaora, pues se supone que tendría que saber e interpretar más de cien cantes.

Por ello quizás sería muy interesante, manteniendo la vigencia de la Llave de Oro que al día de hoy se otorga, se crearan galardones similares (otras Llaves de Oro) que fuesen concedidas al cantaor que interpretara un conjunto de cantes (palos) identificados con áreas cantaoras concretas, verbigracia: Llave de Oro (o similar) de los cantes de Cádiz, de los cantes de Málaga, de los cantes de Sevilla, de los cantes de Córdoba, de los cantes de Extremadura, de los cantes de Granada, de los cantes de Huelva, de los cantes de Jaén, de los cantes de Almería, y de los cantes de la Región de Murcia (Cantes de Levante), dado que los lugares mencionados todos ellos gozan de estilos propios, y que forman parte de un todo, que es el conjunto del llamado Cante Flamenco.

Y, a todo esto, es una grata noticia saber que la Asociación Cultural de Arte Flamenco Ciudad de Cartagena, cuyo presidente es el empresario y abogado Antonio Casado Mena, en fecha próxima emprende un proyecto cultural-flamenco, que cuenta, entre otras subvenciones, con la pertinente ayuda institucional, y en cuyo acto se otorgará, mediante concurso, la 'Llave del Cante de Levante Región de Murcia', al cantaor/a que durante su actuación consiga interpretar los cantes propios de nuestra Región (19 estilos diferentes).