Todo el espacio que rodea al edificio de cabecera se convierte en una zona peatonal. El resultado del proyecto será un espacio abierto a la ciudad y respetuoso con la arquitectura existente, la memoria histórica y el entorno: el edificio quedará totalmente integrado en la trama urbana de Murcia. Esta actuación también pondrá en valor el inmueble, que hasta ahora se encontraba parcialmente oculto.