Los ciudadanos ondean sus banderas verdes del movimiento en Gaza. Se escuchan gritos de emoción y sobre todo de alivio después de mes y medio envueltos en una sangrienta espiral de ataques. Celebran lo que para ellos supone la victoria de la resistencia armada, y con armas festejan esta paz sin fecha de caducidad, a diferencia de las anteriores treguas de las últimas siete semanas.