La Guardia Civil de Castellón detuvo ayer a 13 personas y desarticuló una red que comercializaba de forma ilegal plaguicidas adulterados que podían suponer un riesgo para la salud y el medio ambiente.

Según informó la Guardia Civil de Castellón en un comunicado, además se han imputado a otras 10 personas como parte de la organización.

La red comercializaba los productos fitosanitarios o plaguicidas para el crecimiento de vegetales en las provincias de Murcia, Almería, Ávila, Badajoz, Barcelona, Cáceres, Gerona, Lérida, Madrid, Tarragona, Palencia y Valencia.