La víctima, cuyo nombre corresponde a las iniciales J.L.F., tenía alquilada una habitación en una vivienda donde residían otras tres personas, entre ellos un matrimonio peruano, y la Policía toma declaración a lo ocupantes del inmueble en el transcurso de sus indagaciones tras el suceso, del que informa hoy el diario Sur.

Las fuentes no han precisado si la disputa se produjo con otro inquilino o con una persona ajena al piso pero relacionada con la víctima.

En un principio se creyó que el fallecido había recibido dos puñaladas, pero después se comprobó que eran más y el juez instructor del caso ha declarado el secreto de sumario.