Los juguetes de la marca Lego, más popularmente conocidos como 'legos' a secas, siguen siendo una apuesta segura a la hora de realizar regalos a los más pequeños de la casa. Por eso, tres mujeres del condado de Bulloch (en Georgia, EE.UU.) en su viaje de compras a Charleston (Carolina del Sur), decidieron comprar uno para regalárselo a un niño cuya vinculación familiar exacta con ellas no ha trascendido. Tampoco es que importe que fuese sobrino o primo segundo, porque lo realmente relevante del asunto y lo que le ha llevado a salir en Fox News fue el contenido de la caja.

Nada menos que dos kilogramos de metanfetamina, según el miembro del departamento de policía Jim Riggs, a donde las mujeres llevaron sin pensárselo tan peligrosa carga. Tras ser sometidas a un interrogatorio, para las autoridades quedó más que clara que la intención de las tres mujeres no era en absoluto verse involucradas en un delito de tráfico de drogas a tal escala, por lo que han sido puestas en libertad y se trabaja la línea de investigación de que alguien dejó allí el paquete para que otra persona lo comprase, pero no llegó a tiempo.

La otra hipótesis que barajan los agentes de la DEA que se han hecho cargo del caso es la de que el traficante envió la mercancía por correo, a expensas de que, al haber utilizado una dirección falsa, esta acabase en la oficina de correos esperando que alguien la recogiese. Sin embargo, en citadas ocasiones, no ocurre esto, sino que los envíos que jamás encuentran su dirección son vendidos en una subasta pública. Y así es como este niño acabó con dos kilos de metanfetamina entre las manos.