De las cinco personas que han declarado como testigos hasta el momento en el cuartel de la Guardia Civil de Maranchón, tan sólo uno pasó a ser imputado, por lo que tuvo que proseguir su declaración acompañado de un abogado, informaron a EFE fuentes de la investigación.

La Guardia Civil prosigue esta tarde con la toma de declaración de testigos, cerca de una decena.

Los cadáveres de los 11 fallecidos ayer en el incendio que ha arrasado ya en Guadalajara entre 10.000 y 12.000 hectáreas de pinares han sido rescatados y han comenzado a ser trasladados a un tanatorio de esa capital donde, debido a su estado, solo han sido identificados hasta el momento dos, mientras que de los cerca de 600 vecinos de los cuatro pueblos que tuvieron que ser desalojados ayer, más de la mitad ya ha vuelto a su casa y el resto está previsto que lo hagan en las próximas horas.

El Rey, el Gobierno y todas las fuerzas políticas han transmitido, a través de las autoridades de Castilla La Mancha, donde se han declarado tres días de luto oficial, sus condolencias a los familiares de las víctimas y su pesar por el siniestro.

El Gobierno ha pedido a los ministerios que en el plazo de 48 horas le presenten propuestas de medidas excepcionales contra incendios y ha decidido acelerar las instrucciones a la Fiscalía General del Estado para conseguir mayor eficacia en la persecución de "determinadas conductas", según anunció la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, tras reunirse en Moncloa con los ministros de Defensa, Interior y Medio Ambiente.

Los cuerpos de los fallecidos, que han permanecido toda la noche en la zona donde perdieron la vida ante la dificultad de llegar hasta ellos, fueron localizados y rescatados en torno a las 9 de la mañana.

Las víctimas eran de Guadalajara capital y de las localidades de Cogolludo, sede del retén y donde se han declarado tres días de luto, Balconete, Cifuentes, Jadraque, Arbancón y Humanes.

En primer lugar se encontraron tres cadáveres calcinados en un vehículo; una hora después se rescató otro cuerpo; a las 10.20 horas cinco más y posteriormente los dos restantes.

Todos ellos han ido siendo trasladados, en helicóptero, al tanatorio de Santa María de la Antigua, donde se procederá a su identificación y donde se ha habilitado una sala para que un equipo de 50 psicólogos, entre ellos varios de los que intervinieron con las víctimas del 11-M, atienda a los familiares.

José María Barreda, presidente de Castilla-La Mancha, explicó que los fallecidos, dos de ellos agentes forestales y el resto empleados por Tragsa, tenían entre 24 y 52 años y "amplia" experiencia en extinción de incendios, excepto dos, un hombre y una mujer.

De los dos únicos que han sido identificados, el coordinador del retén, Pedro Almansilla, tenía 34 años de experiencia como coordinador de los servicios de agentes medioambientales de Guadalajara y el otro, Alberto Semillán, era un funcionario con doce años de experiencia en este tipo de tareas.

Explicó que el incendio se inició ayer en la Cueva de los Casares, en Riba de Saelices, que forma parte del parque natural del Alto Tajo, pero luego se extendió en dirección noroeste y salió fuera de este espacio protegido, propagándose en tres direcciones casi de manera simultánea.

Barreda achacó al viento racheado y cambiante, que llegó a ser en algunos momentos de 50 kilómetros por hora, la extensión del fuego, que alcanzo "pronto" un perímetro de 40 kilómetros y que se extendió por las copas de los árboles, lo que hizo que los medios terrestres no pudieran ser "más eficaces".

Respecto a la agilidad con la que se respondió al fuego, Barreda relató que el primer aviso del incendio se recibió en el 112 a las 14.44 horas del sábado, que a las 15.17 horas ya trabajaba el primer retén en las tareas de extinción y que en menos de una hora estaban en el lugar medios aéreos y terrestres de Castilla-La Mancha y del Ministerio de Medio Ambiente.

Ya se han quemado entre 10.000 y 12.000 hectáreas de pino forestal, robledales, cereal y pastos, de las que 2.400 pertenecen al parque natural del Alto Tajo, y aunque se encuentran controlados los frentes entre Villarejo e Iniestola permanece activo el de Ablanque.

En las labores de extinción trabajan hoy unas 240 personas frente a las 210 de ayer y participan brigadas de Cuenca, Daroca (Zaragoza), del ministerio de Medio Ambiente, maquinaria pesada, retenes terrestres y aéreos, así como efectivos de los bomberos de la Diputación de Guadalajara, entre otros.

María Teresa Fernández de la Vega explicó que el Gobierno intervino "desde el sábado con los medios que le solicitaron desde la comunidad autónoma" y que el de Guadalajara "fue uno de los incendios priorizados" de entre los 16 en toda España, que ayer ardían en 7 comunidades autónomas.

"Hay abierta una investigación sobre si hubo o no tardanza", aseguró y consideró que "todas las críticas y denuncias son claramente legítimas", ya que se producen desde una "situación de clara angustia" y tras momentos de "alta tensión", como los que vivió ayer en Alcolea del Pinar, cuando fue increpada por los vecinos que se quejaban de la "tardanza" de los aviones.

El PP ha solicitado la comparecencia urgente en el Congreso de Fernández de la Vega para que informe sobre estos extremos.