Los pasados días 6 y 7 de noviembre se celebraron en el hotel 525, de Los Alcázares, unas jornadas formativas de DIRECMUR que congregaron a unos 120 miembros de equipos directivos de Murcia, contando con la presencia de tres directores generales de la consejería de Educación. Se eligió el entorno del Mar Menor para apoyar al sector hostelero en estos momentos de incertidumbre en la laguna salada. El patrocinador de las jornadas fue Grupo ANAYA.

El objetivo fue dar respuesta a las inquietudes surgidas en el colectivo docente ante las novedades normativas de la LOMLOE, la nueva ley orgánica de Educación, que deberán concretar las comunidades autónomas. Así mismo se esbozaron algunos aspectos relacionados con el acceso a la función directiva a los centros públicos de la Región de Murcia, y se plantearon orientaciones para la buena gestión de centros desde la perspectiva interconectada de las diversas direcciones generales.

Las jornadas dieron comienzo con una mesa redonda que contó con la intervención de Jesús Pellicer Martínez, director general de Centros Educativos e Infraestructuras; Víctor Marín Navarro, director general de Recursos Humanos, Planificación y Evaluación; y Juan García Iborra, director general de Innovación y Formación Profesional.

En la segunda parte de la mañana intervinieron Carlos Marchena González, inspector de Educación de la Junta de Andalucía y director de la división de Educación del grupo ANAYA, y Luis José Gómez Rodríguez, inspector jefe adjunto de la consejería de Educación de Murcia. Ambos inspectores arrojaron luz sobre las novedades de la LOMLOE, y dieron algunas claves sobre la forma de implementar y gestionar en los centros docentes los cambios derivados del nuevo ordenamiento. Los directivos asistentes pudieron plantear sus dudas y peticiones a los representantes y asesores pedagógicos en un turno de palabras que cerró la mañana.

Por la tarde se realizaron talleres y dinámicas de grupo a cargo de miembros de equipos directivos de la Red Innovaedum-DIRECMUR. Las jornadas se clausuraron con un desayuno colectivo, el 7 de noviembre, «volviendo los miembros de equipos directivos a sus lugares de origen con energías renovadas para poner todo el corazón en su labor diaria».