Ha vuelto a salir de su encierro el que fuera presidente del PP y del Gobierno, José María Aznar, que parece no irse nunca como no sea de una vuelta ignominiosa y de manera odiosa. Aznar insultaba e insulta. Hace unos días ha llamado ´tonto útil´ a Pedro Sánchez, aunque éste se esfuerza en no aparecer contra el adversario, se trate de quien se trate.

Lo del tonto útil ha salido de Aznar, publicado en Expansión. Y, como sus fierecillas atigradas, dice también que Sánchez ha hecho «de la formación etarra un partido de gestión de Estado». Cuánto disparate y cuándo error que pagarán en su momento. Pero un amigo mío dice que cómo es posible que un tonto haya ganado a su partido, al PP, tantas elecciones. Eso de los etarras lo recordamos más de Aznar que de Pedro Sánchez, pero ya no se ganan elecciones con el insulto y con la palabrería, sino con el diálogo y las formas serias de un diputado de otras maneras que Casado.

Le recordamos a José María Aznar algunos hechos de su pasado de gobernante del Estado. Para empezar a decirle al PP que el presidente del PSOE no ha negociado los presupuestos con Bildu, sino que Bildu vota lo que le da la gana como libre que es para hacerlo. Gobernando la derecha, pretendió hacer unos presupuestos, con el voto de Bildu. Las negociaciones fueron con los etarras, las hizo Aznar y su partido, y repasamos la historia de semejante ignominia. Fueron negociaciones cara a cara con ETA en Zurich (19 de mayo de 1999). El PP se sentó con Belén González, destacada etarra, y con Mikel Auza, jefe del aparato político en aquel momento de la banda. Por la derecha, asistieron Zatrzalejos, Fluxá, Arriola; y de moderador o relator de la reunión el obispo Uriarte. El PSOE dejó trabajar al PP, y ello porque sabía, y sabe que sin diálogo no se hace paz, sino todo lo contrario. Gobernando Aznar, en el año 98 y 99 se acercaron al País Vasco unos cuatrocientos presos de ETA. Y todo ello negociando la no violencia, Aznar con ETA, pensando en negociar la paz. Y se excarcelaron 370 presos de ETA. Después vino la política que desarrollaría Zapatero hasta lograr la paz en los años en que fue presidente del Gobierno, y hasta la fecha.

Sabe bien el PP que el PSOE lo que necesita es gobernar en el diálogo para continuar una política de paz, porque como diría mi amigo Xiqui Benegas, la paz es expansible, y ello es lo que se sigue haciendo, sin necesidad de más explicaciones sino deseando todos que la paz sea así, normal, perdurable y, digo, expansible.

Recordaré algunas frases de Aznar para que su partido siga tomando nota de los ocurrido en esos momentos (4 del de del 98): «Estoy dispuesto a ser generoso, si es necesario, a ser comprensivo. Merece la pena si con ello conseguimos la paz». Pues bien, si eso es verdad, aprenda su partido y él mismo de aquella frase que nos extrañó tanto porque iba acompañada de una referencia al Movimiento Vasco de Liberación Nacional. Y sepan que repitió varias veces que «tomar posesión de un escaño siempre es preferible a empuñar las armas».

Pues bien, no insulten con barbaridades y recuerden lo que decía su jefe en aquellos días y traten a Bildu como partido parlamentario, y dejen de insultar todos los días y de recordar lo que no cumplen.

Y dejen a los ultras de su derecha, la extrema derecha que les tiene totalmente ganada la partida contra lo que ustedes dicen amar tanto, la oposición; y al mismo tiempo, los recuerdos de aquella España única y aquel odio de los sueños enfermizos de sus amigos de la Plaza de Colón, acompañados del partido que nació para quitarles ese liberalismo rancio del que presumen tanto.