¿Cuál es el problema de la cultura?. Que la gente no está dispuesta a pagar por ella, y menos ahora, con todo a mano en la red y nadie en la caja. O sea, el problema de la cultura es que la gente no la valora, o, si lo hace, cree que pertenece a otro sistema de valores en el que no rige el dinero. A lo sumo está dispuesta a echar unas monedas al platillo, o darle al creador un tacillo de sopa y un chusco, o, si de un mecenas se trata, a becar algo al artista a cambio de que éste le proporcione lustre. Como la cultura hace falta, esa es la razón de que deba cargar sobre los presupuestos. Ahora bien, ¿por qué hace falta la cultura? Aquí llega el mayor problema, ya que para poder apreciar su valor, y responder a la pregunta, hace falta ser culto. Como buena parte de los gobernantes no lo son, y la mayoría de sus electores tampoco, ya se ve lo cruda que está la cosa para la cultura.