Tenía que ser Cristóbal Montoro quien nos devolviera a la realidad y desvelara las intenciones de nuestros rectores públicos: como hiciera diez años atrás (cuando era ministro de Hacienda con Aznar), ha vuelto a afirmar que en España no ha habido burbuja inmobiliaria (da igual que los índices revelen una caída del precio de los pisos de segunda mano superior al 40% desde 2007) y que el sector del ´ladrillo´ es ´vital´ para salir cuanto antes de la crisis.

Tal como sucedió hace 20 años, tras los actos de contrición por haber levantado pisos a diestro y siniestro y tras manifestar el propósito de enmienda de orientar la economía a la exportación y hacia un nuevo modelo productivo, Montoro nos comunica que se hará lo posible para resucitar la estructura basada en el ladrillo y el crédito. Tan solo hay un inconveniente: nuestro contexto actual.

Y es que, a diferencia de los 90, cuando nuestros gobernantes podían manipular la economía a su antojo (gracias a la devaluación de la peseta, por ejemplo), ahora estamos bajo vigilancia de Bruselas y del BCE. No solo eso: todos los agentes están en fase de desendeudamiento (sector privado) o de control del déficit y compromiso ineludible de pago de los intereses de la deuda (sector público). Por si fuera poco, no hay CAMs ni Cajas Castilla-La Mancha que financien AVEs hasta el pueblo más recóndito o aeropuertos sin aviones. Sin olvidar el factor fundamental: para que se vendan pisos, deben darse condiciones demográficas (están en el mercado las generaciones menos pobladas y que, en muchos casos, heredan pisos de sus padres) y de oferta (aún hay centenares de miles de viviendas vacías, que tampoco comprarán unos emigrantes que vuelven a sus países, ante la perspectiva de vivir en uno con un paro del 26%). Así que no, ministro, esta vez lo tiene más complicado para satisfacer sus fantasías (no) burbujistas.

CÓMO LO VEN

Sigue la desconfianza. A pesar de que EE UU, oficialmente, dejó atrás su Gran Recesión hace cuatro años, las grandes fortunas estadounidenses siguen sin fiarse de la solidez de la recuperación actual. Así, según una encuesta citada por la cadena económica CNBC, los ricos norteamericanos tienen cerca de un 40% de sus bienes en cash y hasta un 17% en bonos (es decir, activos ´seguros´), frente a un 25% en participaciones accionariales.

Explotación en Holanda. Trouw denunciaba un fenómeno creciente en los Países Bajos: la explotación de trabajadores procedentes de Europa Central y del Este en el sector servicios. No es inusual encontrarse a ciudadanos checos o polacos, a los que se les ofrece un alojamiento en malas condiciones y que trabajan hasta 20 horas al día en contratos de dudosa fiabilidad. Por su parte, las empresas de trabajo temporal que intermedian en estos casos afirman que actúan de manera correcta.

CÓMO NOS VEN

Declive bipartidista. Un análisis de Policy Network advertía de que, pese a los incipientes signos de mejora económica en el país (tímido crecimiento, freno en la destrucción de empleo), la salud política sigue deteriorándose: el apoyo registrado a los dos principales partidos, PP y PSOE, oscila alrededor del 60% en su conjunto (la tasa más baja desde la recuperación democrática). De ello se benefician formaciones como Izquierda Unida, UPyD y los partidos independentistas, en Cataluña y el País Vasco.

Sigue el eco de las preferentes. The Independent trataba recientemente lo que califica como «el gran robo en España»: numerosos pensionistas siguen protestando tras ver que los ahorros de toda su vida se han esfumado, tras haberlos invertido en participaciones preferentes. Centrándose en Bankia, relata el caso de Félix Pastor, cerca de cumplir 60 años y que habría perdido 104.000 euros o el de Federico Jarque, quien, a los 91, lucha por recuperar 60.000 euros.

QUÉ SE CUECE

Huffington internacional y noticias. Capital New York destacaba que The Huffington Post y el Instituto de Gobierno Berggruen se han puesto de acuerdo para crear World Post, una web con textos originales de carácter internacional y que contará con una red propia de corresponsales. Mientras el contenido estrictamente periodístico correrá a cargo de los responsables del Huffington Post, la línea editorial vendrá marcada por el grupo Berggruen.

Noticias, ¿por Facebook o Twitter? Clases de Periodismo se fijaba en una encuesta del Pew Research Center, en EE UU, donde se apuntaba que una mayoría de estadounidenses (hasta un 30%) recibía las noticias a través de Facebook, en contraposición a aquellos que las recibían por Twitter (solo un 8%). Sin embargo, los cibernautas que escogen esta última opción son más jóvenes, de mayor nivel educativo y más móviles que los que optan por informarse a través de la red creada por Mark Zuckerberg.