Qué hermoso San Valentín nos ha ofrecido este año el telehipódromo. Sensible al arte de Cupido, Risto Mejide (‘Viajando con Chester’, Cuatro) se ha reunido con Bárbara Rey y le ha preguntado si estuvo enamorada de Juan Carlos I.

Contestó: "Al principio, sí. Era muy guapo". Pero al final: "Se portó muy mal (...) Me destrozó la carrera (..) Me vetaban en las teles (..) Le dejé entrever que me hacía falta dinero, pero él ... ¡como quien oye llover!". El objetivo de Risto era escarbar en aquellas jornadas bragueteras de hace más de 40 años atrás, aquella mezcolanza de sexo, espionaje, amenazas, robos, chantajes y cintas de audio y de vídeo a granel. Contó Bárbara que los que les grababan al Rey y a ella eran otros, y que ella grabó poco, y lo hizo porque se lo aconsejó "una mala amiga". Risto le pidió que diera su nombre, pero Bárbara se negó. Hombre, solo que Risto hubiera ido al archivo del propio imperio Mediaset, habría encontrado la entrevista que se le hizo en el ‘Deluxe’ a la ‘amiga’ Hortensia (enero 2017). Allí lo contó todo. Tampoco ha revisado Risto la entrevista de Gonzo, en La Sexta, al exdirector del CNI Alberto Saiz (28-Nov-2021) en donde cuantifica dos entregas a Bárbara –una de 25 millones y otra de 600 millones de pesetas diferida en 10 pagos– además de contratos en teles públicas. En fin, que de este viejo tema de Bárbara y la bragueta regia, hoy lo único relevante sería saber si estos servicios se pagaron con el dinero de todos.

Los flechazos de amor de TV-3 a Pep Guardiola también son muy hermosos. Desde que en 2011 lanzó aquella fórmula de la independencia madrugadora ("Si ens aixequem ben d’hora, ben d’hora, som un país imparable") TV-3 le saca constantemente en los ‘TN’. Ya quisiera Messi para sí tan virtuosa atención. Vive en Manchester, entrena un equipo de la liga inglesa, pero le hacen un seguimiento como si estuviera entrenando al Girona F.C. Ayer lo sacaron dando una rueda de prensa, en inglés, disculpándose por algo que dijo de un tal Gerrard. No sé quién es este jugador, ni tampoco nos contaron cuál fue la frase inconveniente, ni cuándo la dijo, pero seguro que es un asunto de colosal importancia para la Catalunya futbolera. Tengo que hablar con mi querido Emilio Pérez de Rozas y que me ilumine acerca de este San Valentín diario, tan bonito, de TV-3 hacia Guardiola.