La etapa de Óscar y Moisés está siendo una de las más trepidantes del programa: una vez superado el millón de euros de bote y tras varios programas, el riojano ha puesto en peligro en varias ocasiones la continuidad de su contrincante.

Pero no hace tanto que 'Pasapalabra' tenía enganchados a sus seguidores con los duelos de Fer y Moisés. Ambos concursantes se habían convertido en los nuevos Rafa y Orestes y cada tarde dejaban sin respiración a los seguidores del programa con sus enfrentamientos de infarto. Pero su duelo llegó a su fin.

Después de 84 programas, el gallego era elimado del concurso tras su paso por la silla azul. Después de fallar dos veces, Fer se despedía del programa dejando a los espectadores impactados ante esta inesperada eliminación.

"Gracias por tu alegría, me has hecho el programa muy fácil. Gracias por tu ironía, tu gallego, tu inteligencia, tus bailes y tu saber estar. Te quiero dar las gracias personalmente y de parte de todo el programa", le decía Roberto Leal. Aun así, no se va con las manos vacías, ya que el de Santiago de Compostela había acumulado 42.000 euros. Una impresionante cifra con la que podrá cumplir muchos de sus objetivos.

Un par de días después de su eliminación, Fer reapareció en sus redes sociales para hacer balance de su paso por el concurso y aprovechar su visibilidad para hacer una denuncia pública.

"Hoy he hecho algo que me había prometido no hacer jamás: leer comentarios sobre mi periplo catódico. Para mi sorpresa, lejos de ‘haters’ y alharacas, he encontrado centenares de muestras de apoyo, que estoy recibiendo por múltiples vías", comenzó diciendo.

"Mi aventura duró lo que tenía que durar. De hecho, duró muchísimo más de lo que yo mismo esperaba. Llegar a 84 programas en 'Pasapalabra' sin previa experiencia “concursil” no es para estar triste", confesó antes de dar las gracias al programa, a su compañero y a todos los invitados que le ayudaron en su paso por el programa.

También aprovechó la ocasión para reflexionar sobre su paso por el programa y sincerarse con sus seguidores sobre los cómplicados momentos que vivió. "Resultó una odisea y, por momentos, el cansancio físico y mental era enorme, especialmente hacia el final", aseguró.

"Quizá alguien escuche que lxs investigadorxs no podemos seguir viviendo pendientes de cuánto se retrasa la siguiente convocatoria de la que dependemos", escribió para denunciar las complicadas condiciones a las que se enfrentan las personas que están preparando un doctorado.

"Quizá alguien escuche que necesitamos que el EPIPF recoja salarios dignos y que la carrera investigadora se aleje de una precariedad incompatible con construir proyectos vitales a edades razonables."

"Y como dije en mi vídeo póstumo, mi balance general es positivo", terminó diciendo en este hilo de Twitter que no deja de llenarse de muestras de cariño por parte de los seguidores del programa.