Las verduras siguen siendo la materia pendiente en casi todos los hogares, especialmente donde hay niños. Quizás sea por el color, la textura o que no encontramos los trucos suficientes para cocinarlas de forma atractiva, pero lo cierto es que siempre son esos alimentos que se toman como por obligación.

De ahí que los nutricionistas y expertos en alimentación sigan buscando nuevas alternativas para conseguir que las verduras se conviertan en las reinas de cualquier menú, experimentando y probando nuevas técnicas culinarias. Este ha sido el caso del chef y escritor gastronómico J. Kenji López-Alt que ha encontrado el mejor truco para disfrutar de unas judías verdes espectaculares.

Las judías verdes, muy nutritivas, pero ¿sosas?

En el modo de preparación de los alimentos está la clave perfecta para conseguir el éxito. Es así como se necesita innovar, buscar nuevas técnicas y recetas novedosas que den un giro a esos platos que, en un principio, resultan aburridos y especialmente sosos. Mucho más si tenemos que batallar en la mesa con niños.

Una de esas verduras que suele estar presente en nuestra mesa, pero que no acabamos de encontrarle una especial simpatía son las judías verdes. Resultan ser un alimento especialmente nutritivo, ideales en el menú infantil. 

Generalmente, las preparamos hervidas, al vapor o salteadas en la sartén. Sin embargo, como realmente quedan más sabrosas es si las congelamos antes de cocinarlas. 

Congelar antes de cocinar, un truco sencillo y sabroso

Las judías verdes, después de cocinarlas, suelen quedar con una textura blanda que no suele ser del agrado de todos los comensales. De ahí que los niños, especialmente, las rechacen. Sin embargo, según el chef, si las congelamos antes de cocinarlas, quedarán con esa textura crujiente que tanto apetece.

Se trata de un truco la mar de sencillo, pero que resulta muy efectivo. De hecho, cuando hierves cualquier tipo de verdura e inmediatamente la pasas por agua fría, notas que su textura ha cambiado y se vuelve más crujiente. Si las congelas antes de utilizarlas en la olla o la sartén, se consigue aumentar esta textura y, por lo tanto, es más apetecible.

Una vez has comprado las judías verdes, los pasos son los siguientes: congelar inmediatamente, dejar descongelar y después cocinarlas al gusto. Esta misma técnica serviría también para otro tipo de verduras finas y alargadas como los espárragos.

¿Te animas a probarlo? Seguro que triunfarás con las verduras más ricas y apetecibles.