La investigación, dirigida por el juez Baltasar Garzón desde el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, es consecuencia de la desarticulación a finales del mes pasado del comando "Urederra" de ETA afincado en la provincia de Guipúzcoa.

Según el Ministerio del Interior, como consecuencia de esta desarticulación, las fuerzas de seguridad tuvieron conocimiento de la posible participación de Zigor Ruiz Jaso, alias "Lukas", en el atentado perpetrado el 28 de febrero de 2006 contra el Instituto Social de la Marina de Motrico (Guipúzcoa).

Las mismas fuentes añadieron que las pesquisas continuaron en Francia, en colaboración con la policía francesa, y concluyeron con la localización de Ruiz Jaso en la citada ciudad inglesa, donde residía.

Otras fuentes consultadas por EFE aseguraron que los tres presuntos etarras formaban un "talde" o grupo de ETA y que se dirigían a esta ciudad para "actuar" allí, aunque no precisaron si su misión era recopilar información sobre posibles objetivos terroristas o tenían intención de perpetrar un atentado.

La Fiscalía de la Audiencia Nacional solicitará al magistrado que curse una comisión rogatoria urgente para desplazarse a Inglaterra y poder interrogar a los detenidos.

Por otra parte, fuentes de Scotland Yard señalaron a EFE los tres detenidos van a ser trasladados a Londres, donde comparecerán esta tarde ante un tribunal.

Zigor Ruíz Jaso, de 28 años y nacido en Pamplona, quien participó en San Sebastián en la presentación pública de Segi, fue detenido en otras tres ocasiones.

En concreto, el 6 de junio cuando se encontraba pegando carteles en protesta por unas detenciones practicadas por la policía autónoma vasca; el 10 de abril de 2001, por un delito de coacciones, y el 8 de marzo de 2002 por formar parte de la organización juvenil "Segi".

Iñigo Albisu, de 23 años y natural de San Sebastián, se presentó voluntariamente en la Audiencia Nacional el 2 de diciembre de 2002, por estar presuntamente relacionado con desórdenes públicos (kale borroka) ocurridos durante el verano de 2004 y en la Semana Grande del 2005 en San Sebastián, aunque fue puesto en libertad.

La tercera detenida, Ana López Monge, de 36 años y natural de Bilbao (Vizcaya), se encontraba en paradero desconocido desde septiembre de 2002.

Según el Ministerio del Interior, la policía autónoma vasca había intentado arrestarla por estar implicada en las actividades del "Comando Olaia" de ETA, dos de cuyos integrantes fallecieron al explotar un artefacto que transportaban en el vehículo en el que circulaban el 23 de septiembre de 2002.

Por ello, el Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, había ordenado su "búsqueda, detención e ingreso en prisión" por pertenencia a banda armada o terrorista.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, felicitó a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad por la operación, de la que dijo que se ha desarrollado con la colaboración de Francia y de las autoridades judiciales británicas.