Los espacios de depósito de basuras del barrio murciano de La Flota tendrán que hacer hueco en las próximas semanas a un nuevo envase, el contenedor marrón, que llega para poner en marcha un nuevo proyecto de reciclaje con el que se quiere lograr una separación de residuos más minuciosa.

En este nuevo contenedor marrón los ciudadanos tendrán que tirar los restos orgánicos de los alimentos que utilicen en sus domicilios con el objetivo de que se procesen por separado del resto de la basura cuando llegan a la planta de tratamiento de Cañada Hermosa.

El proyecto piloto en el barrio de La Flota arrancará con un total de 30 contenedores de distintos tamaños y con distintos tipos de aberturas con el objetivo de ir probando con los vecinos cuáles de ellos resultan más útiles para su uso, tal y como han explicado los responsables del proyecto a esta Redacción. Este quinto contenedor vendrá a sumarse a los cuatro que ya funcionan en el municipio: verde (vidrio), amarillo (plástico), azul (cartón y papel) y gris (resto de basura orgánica) y con su puesta en marcha se cumple uno de los compromisos adquiridos por la empresa Cespa, concesionaria del servicio de gestión de basuras y limpieza viaria de Murcia, en el pliego de condiciones de su último contrato.

Aunque en un primer momento los contenedores para restos orgánicos lleguen sólo al barrio de La Flota, está previsto ampliar su instalación a otras zonas del municipio, así como a las ocho plazas de abastos y a más de 150 restaurantes. No obstante, el proyecto lleva algo de retraso, ya que la concejala de Movilidad Sostenible y Juventud, Rebeca Pérez, anunció a principio de año que el contenedor estaría en Murcia tras el verano y, finalmente, su llegada se va a ir casi a Navidad.

Con el contenedor marrón se busca ir un paso más allá en la recogida selectiva y separar en él algunos restos como pueden ser cáscaras de huevo, las pieles de frutas como la naranja o la corteza del plátano. Los restos que se depositen en él servirán para alimentar a la granja de larvas de mosca que se está construyendo en Cañada Hermosa, una granja de 700 metros cuadrados en la que trabajarán cinco empresas y en la que gracias a la materia orgánica se podrá hacer abono y proteína de uso alimentario para animales.

Fuentes municipales recuerdan que se ha elegido el barrio de La Flota para iniciar la puesta en marcha del contenedor marrón porque es una de las zonas de la ciudad donde hay un mayor índice de reciclaje y los vecinos están más concienciados con la separación de residuos.

Recuperación de Vidrio

En Cañada Hermosa también se ha puesto en marcha una nueva planta de recuperación de vidrio, gracias a Ferrovial Servicios, que ha recogido casi 1.000 toneladas de vidrio depositado en los contenedores grises (denominados de resto o materia orgánica), es decir, no específicos para este material. El objetivo de esta instalación, que se comenzó a construir en 2017, es separar la materia orgánica recogida para su posterior traslado a la planta de compostaje donde se convertirá en bioestabilizado.