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Protesta

Anonymous se manifiestan para evitar la censura en Internet

Medio centenar de usuarios de la Red protestan contra la Ley Sinde y piden que no se enjuicie al fundador de Wikileaks, Julian Assange

Su finalidad no era reunir un gran número de personas en la manifestación, sino congregar a las suficientes como para informar a muchos. Alrededor de medio centenar de anonymous se manifestaron ayer desde el Ayuntamiento hasta El Corte Inglés para protestar contra la censura en la Red. Para ello, se centraron en condenar la Ley Sinde y pedir que no se enjuicie a Julian Assange, fundador de Wikileaks. En la salida se concentraron unos treinta anonymous y por el camino se les unieron una veintena más.

En total, alrededor de medio centenar de internautas, ocultos tras la máscara emblema de la película V de Vendetta, estuvieron durante dos horas repartiendo mil hojas informativas y cien caretas, como las que ellos usaban, por la ciudad. Los Anonymous realizaban así una manifestación divulgativa en la que pusieron en prática su lema «infórmate e informa»·

Los Anonymous son un fenómeno que nace en Internet y que ayer saltó de la pantalla a las calles. Está integrado por personas individuales que defienden la libertad de expresión en la Red, pero que ni se identifican ni forman asociaciones. La mayoría de los que se reunieron ayer apenas habían mantenido contacto previo. Aún así, tras el acto informativo, se reunieron para hacer una puesta en común de ideas. Los Anonymous murcianos volverán a manifestarse el día 15 de enero, según informó la simpatizante Marta Anónima, que recoge las actividades relacionadas con esta iniciativa en el blog ´freeleaks.wordpress.com´.

Assange, caza de brujas

La marcha de ayer tenía dos objetivos principales. Uno de ellos era pedir que no se enjuicie a Julian Assange, líder de Wikileaks, (organización que publica a través de su web las filtraciones del contenido de los cables enviados por las embajadas de Estados Unidos). Aunque, como decía Marta Anónima, «no defendemos tanto a Assange como lo que él hace». Para los Anonymous, esto es una «caza de brujas», un «ataque a la libertad de expresión y al derecho del ciudadano a estar informado». Muchos de los Anonymous bromeaban con la posibilidad de crear un ´Wikileaks murciano´, «estaría bien, pero no sé si cambiaría algo», decía uno tras su careta.

También se protestó contra la Ley Sinde, que propone la legalidad del cierre de páginas web. Los Anonymous se oponen, principalmente, a que el Gobierno pueda clausurar webs que le resulten incómodas, sean cuales sean. Y como cada Anonymous tiene su opinión, uno de los que se concentró ayer, que no quiso identificarse, explicaba que «si escucho en Internet un grupo que me gusta, luego me puedo animar a comprar el CD. Pero no pueden obligarme a adquirir algo que no sé si va a merecer la pena. Eso es un abuso para el consumidor», relataba este internauta.

Para Orión –el nick en la Red de otro de estos anonymous–, el problema es en buena parte económico. «Muchos aprendemos gracias a los recursos en la Red. La gente se descarga programas y tutoriales para aprender a manejarlos. Gracias a eso, muchos pueden ampliar currículum y tener más posibilidades de encontrar trabajo. Si lo quitan, algunos no podremos pagar esa formación», explicaba.

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