Opinión

Lorca y el ferrocarril: Un escenario Incierto

La situación actual es que el servicio está paralizado y nadie sabe hasta cuándo

Tramo urbano del ferrocarril desde el paso a nivel de la Alameda de la Constitución.

Tramo urbano del ferrocarril desde el paso a nivel de la Alameda de la Constitución. / Pilar Wals

Juan Pérez Gil

En los últimos años del siglo XIX, paralelo al ‘boom de la minería’, llegó el ferrocarril a Lorca. En marzo de 1885 se inauguró el primer tramo.

El ferrocarril es un vehículo fundamental para el movimiento de personas y mercancías a la vez que impulsa la actividad comercial. Fruto de todo ello, en aquel momento, fue el asociacionismo de los principales representantes de la industria y el comercio local y, como consecuencia, la creación, en octubre de 1899, de la Cámara de Comercio e Industria de Lorca.

El 1º de octubre de 2021, 136 años después de su inauguración, se clausuró el servicio de cercanías, a pesar de que los técnicos del Corredor Mediterráneo, siempre han sostenido, que eran perfectamente compatibles los trabajos en la remodelación de la infraestructura, con la continuación de la circulación de los trenes.

Esta es la situación actual, con el servicio paralizado, y lo que es más grave, nadie sabe hasta cuándo… Tras el pasado inmediato, ahora, tenemos un complicado escenario. Pero miremos hacia el futuro a través de ‘la planificación’ actual. ¿San Diego será simplemente un apeadero o una estación Intermodal? ¿El soterramiento por debajo de Sutullena, cuantas vías tendrá? Todo lo que sea menos de cuatro vías, como corresponde a la entidad de Lorca y su comarca, no serían de recibo.

Todavía hay tiempo para tomar decisiones, las ‘fuerzas vivas’ deben ponerse en marcha y reivindicar una mejor infraestructura. No acabamos de entender el temor a elevar las exigencias y demandas al político de turno. No es buena esta pasividad que podía dar lugar a hipotecar nuestro futuro y el de las siguientes generaciones, en lo que respecta a esta infraestructura ferroviaria.

Lo dicho, ‘El ferrocarril mueve personas y mercancías’ y, como consecuencia, dinamiza la actividad del área que comunica con otros destinos. Ya hace 16 meses que se nos interrumpió el ‘cordón umbilical’ que nos conectaba con el resto del mundo y estamos inmersos en un escenario incierto. ¡Lorca se merece otra cosa. Todavía, estamos a tiempo!

Juan Pérez Gil es miembro del colectivo ‘Por el Corredor Mediterráneo’.