La Casa de los Guevara podría convertirse en el Museo de la cultura argárica si sale adelante un proyecto que lidera el Ayuntamiento. El inmueble, con distintas construcciones, ocupa toda una manzana, la conformada por las calles Corredera, Juan II, Núñez de Arce y Espín. Presenta una acentuado deterioro que en 2017 le llevó a ser incluido en la ‘Lista roja’ del patrimonio de la Asociación Hispania Nostra, hecho que supuso poner el foco de atención en la «nula conservación del edificio, su altísimo nivel de deterioro y en la obligación de mantenimiento y conservación de los titulares del edificio».

La propuesta pretende instar a la Comunidad Autónoma para que, mediante la adquisición o embargo, se haga con el edificio, se restaure y sea cedido al municipio para albergar un Museo de la cultura argárica, acrecentando la Red de Museos de la Región de Murcia. El inmueble data del siglo XVII. Se trata de un edificio ejemplo de la arquitectura tradicional barroca lorquina, de la que se conservan contados ejemplos, y que perteneció a una de las familias más distinguidas del Reino de Murcia, los Guevara. «Es un edificio de alto valor cultural, artístico y monumental», afirma la concejala de Cultura, María Ángeles Mazuecos, quien añade que ha sido incluido su estudio en «tesis doctorales y publicaciones realizadas por doctores en Historia del Arte, lo que nos habla sobre su enorme relevancia».

Cuenta con sótano, dos plantas y falsas con tres fachadas, torreta y una portada procedente del Palacio de Guevara. De esa manera se explica que la puerta de acceso al patio desde el zaguán de la también conocida como ‘Casa de las columnas’ esté visiblemente descentrada con respecto al acceso principal enmarcado por la portada. Se colocó una nueva y la anterior fue vendida por don Juan de Guevara a su primo, don Alonso García de Guevara. En el escudo de armas aparece el yelmo que en la nueva es sustituido por la corona ducal.

De la Casa de Guevara es destacable su decoración y elementos interiores. De ellos, da cuenta el profesor del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Murcia, Pedro Segado Bravo, en su libro Lorca barroca donde hace algunas afirmaciones como estas: «Dicha portada da paso a un amplio zaguán, cubierto con una bóveda lucernario octogonal», «es de destacar la decoración pintada de la cubierta de la gran sala», «es curioso que estén representados en los medallones de las esquinas y centro, Cristo, María y los Doce Apóstoles» y «el resto de la decoración es a base de flores, cabecitas de querubines, animales fantásticos como los grifos y decoración geométrica».

Rico artesonado

Pinturas, murales y un rico artesonado ricamente decorado, también adornan algunas de las salas interiores del edificio por el que los lorquinos «sienten un apego sentimental» por haber albergado en su interior Telégrafos o la Peña Madridista, recuerda Mazuecos, quien explica que tras tener diversos dueños está ahora en manos de propiedad privada y de la Sareb. «El inmueble sufre un altísimo deterioro que se está viendo acelerado al no realizarse la más mínima intervención para evitar esto último por parte de sus titulares efectivos y pese a contar con un BIC que no se puede descontextualizar del edificio original», indica la edil.

En busca del Patrimonio de la Humanidad

Al Pleno también se llevó -dentro de la misma moción- la propuesta de que el Ayuntamiento de Lorca lidere la unidad de acción con otros ayuntamientos de las provincias de Murcia, Alicante, Almería, Granada o Jaén donde la presencia de la cultura de El Argar fue significativa, al objeto de promover su candidatura a la declaración de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. «Lorca es el municipio más rico de la Región arqueológicamente hablando, habiendo estado habitada ininterrumpidamente desde hace más de 5.500 años. Además, contamos con el poblado más extenso de esta cultura», recordó Mazuecos. P. WALS