La causa que hasta ahora se instruía en un juzgado de Yecla (Murcia) por la muerte violenta de un vecino de Moratalla cuyo cadáver fue encontrado en un paraje rural de aquella población casi año y medio después de su desaparición ha pasado a los juzgados de Novelda (Alicante).
El auto por el que las diligencias pasan a los juzgados de esta última población, al que ha tenido acceso Efe, era previsible desde que se supo que el crimen se habría cometido en el domicilio de uno de los detenidos e ingresados en prisión, ubicado en la población alicantina de Pinoso.
Sobre la personalidad de éste, las diligencias recogen que le constan 32 detenciones por distintos delitos, como estafa, lesiones, robos y malos tratos, entre otros, por lo que los agentes habían alertado al juzgado de instrucción, que acordó su ingreso en prisión, sobre el riesgo de fuga y de destrucción de pruebas caso de ser puesto en libertad.
Y añaden que A.V. ya fue detenido con anterioridad como presunto autor del incendio del coche particular de un guardia civil, hechos que son objeto de las diligencias que se tramitan desde 2016 en un juzgado de instrucción de Novelda (Alicante).
Abundando en su presunta peligrosidad, señalan así mismo que durante la intervención de sus llamadas telefónicas se pudo captar una conversación en la que, presuntamente, mostraba su deseo de dañar el coche de una policía local de Pinoso.
El descubrimiento de los restos mortales en el lugar donde habían sido enterrados, en un monte de Yecla cercano a Pinoso, fue hecho a raíz de las declaraciones de uno de los presuntos implicados en el crimen, que llevó a los agentes de la Policía Nacional hasta ese paraje.
Según lo manifestado por varios de los investigados, la muerte de José A.M., conocido por "El Rosao", se produjo en el transcurso de un enfrentamiento que se originó cuando uno de ellos propuso acabar con su vida para quitarle los 34.000 euros con los que había acudido a la vivienda para una operación de tráfico de drogas, presuntamente.
La desaparición de este hombre se produjo en junio de 2019, cuando se había desplazado con su coche hasta ese domicilio, desde Moratalla, donde residía.
Su vehículo fue encontrado hace unos días, desguazado, en el zulo ubicado junto a la vivienda de dos hermanos, ubicada igualmente en Pinoso, que también fueron detenidos.
La localización de los restos del coche fue conseguida por la Policía gracias al contenido de una llamada telefónica realizada el pasado cinco de noviembre en la que otro presunto implicado, pendiente de detener, hablaba con la novia de uno de los hermanos dueños del zulo y mostraba su preocupación por si los agentes descubrían lo que había allí.
