Las plantaciones en el campo de Lorca se tendrán que reducir entre un 40 y un 50%, a partir de enero, si no cambia la meteorología y se consigue el agua que, previsiblemente se necesita para el primer semestre de 2018. Ese es el mensaje que los responsables de la Comunidad de Regantes de Lorca van a transmitir en la reunión informativa que hay convocada para el jueves (26 de octubre) a partir de las 20.30 horas en los salones del restaurante El Faroli, junto al santuario de la Virgen de las Huertas.

La situación de sequía afecta a más de 10.000 agricultores, la mayoría de ellos pertenecientes al regadío tradicional, al igual que a las empresas hortofrutícolas que verían, igualmente, alterados sus compromisos de mercado con el exterior, especialmente con Europa. Ello implicaría también la pérdida de centenares de puestos de trabajo, que quedarían en el aire a la espera de tiempos mejores.

La parte positiva que se explicará con detalle en la reunión por parte de los dirigentes de la Comunidad de Regantes es que, al menos hasta diciembre, el agua de riego está garantizada. Es así por los 11 hm3 disponibles, de los que, seis de ellos pertenecen al pantano de Puentes, que hasta el momento no se habían utilizado, pensando en lo que podría ocurrir y finalmente ha ocurrido.

Con estos 11hm3, según fuentes de los comuneros lorquinos, se puede hacer frente a los cultivos que hay plantados y sacar adelante la cosecha de alcachofa, brócoli y lechuga que ya están plantados o a punto de hacerlo. La recolección de lechuga y brócoli acaba con el año natural.

El problema vendrá, según las mismas fuentes, a partir de enero y hasta finalizar el primer semestre de 2018, cuando empiezan de nuevo las plantaciones de lechuga, brócoli o cebolla.

Para esos seis meses la comunidad de regantes de Lorca podría disponer solamente de unos 20 hm3 de agua, cuando las necesidades, en comparación con otros años, son del doble, con base a los cultivos que se hacen. Esos 20 hm3 disponibles serían de agua procedente de pozos y la desaladora de Águilas, fundamentalmente, porque las aportaciones tanto de la cuenca como del Trasvase Tajo-Segura seguirían siendo cero, como hasta ahora. Los regantes lorquinos tienen contratados anualmente 23 hm3 de agua procedente de la planta desaladora de Águilas para el riego de más de 20.000 hectáreas de terreno a muchas de las cuales no llega aún el suministro por falta de infraestructuras.

El motivo principal de la reunión del jueves es para informar sobre la grave situación planteada ante la falta de recursos hídricos y tratar de buscar soluciones. Se pretende apercibir a los agricultores de la «cruda realidad» y que sepan a lo que se enfrentan en el caso de que decidan poner en marcha nuevas plantaciones a partir de enero de cara, sobre todo, a la próxima primavera, sin garantía alguna de que puedan regar.

Este tipo de reuniones las va a seguir realizando el Sindicato Central de Regantes entre las alrededor de 90 comunidades de regantes que hay distribuidas por la región para escuchar sus opiniones y ver entre todos las medidas que se pueden llevar a cabo, entre las que no se descartan las movilizaciones.

La comunidad de regantes de Lorca informó también de que durante los días 25 y 26 de octubre no se suministrará agua para riego.

Se hace un llamamiento a los agricultores en general, representantes de las cooperativas y a cuantas personas estén relacionadas con la agricultura, para que asistan a la reunión del día 26 de octubre.