La abstención del grupo Ciudadanos permitió ayer al equipo de gobierno del PSOE en el ayuntamiento de La Unión sacar adelante en pleno los presupuestos para este año, que suman 10,5 millones de euros y que contaron con el voto en contra de PP e IU.
El pleno se inició con una exposición por parte del interventor municipal que, a petición del alcalde, Pedro López, explicó a los corporativos que las cuentas de 2015 se han cerrado sin necesidad de incrementar ni un euro la deuda, pese a que cuando llegó la nueva Corporación, ya se había consumido un 75% del presupuesto. Asimismo, el interventor recordó que el Ayuntamiento ha logrado reducir los intereses a pagar por un préstamo suscrito en 2014 para pago a proveedores, lo que le ha permitido un importante ahorro.
El PP criticó duramente esta intervención y acusó al interventor de actuar más como político que como funcionario, por lo que el alcalde le exigió que se disculpara.
