Giovanni trabaja para un prestigioso grupo de reflexión internacional que se propone reurbanizar las periferias de las ciudades italianas. Monica trabaja como cajera de un supermercado en uno de los suburbios más poblados de Roma. Dos mundos opuestos condenados a entenderse cuando descubren que sus correspondientes hijos adolescentes, Agnese y Alejo, se han enamorado. A pesar del inevitable rencor inicial por la diferencia social y los prejuicios que tienen los dos, Giovanni y Monica deciden unir sus fuerzas para intentar terminar con la historia entre sus hijos. Juntos vivirán en primera persona la vida del otro, entre multicines de periferia, playas abarrotadas y locales de lujo.